Fonema S


INDICE


Págs.
Marco Contextual…………………………………………………………………. 1
Diagnóstico………………………………………………………………………… 2
Propuesta…………………………………………………………………………… 6
Conclusión…………………………………………………………………………. 9
Bibliografía…………………………………………………………………………. 10

















MARCO CONTEXTUAL

Alberto es un niño de cinco años que presenta ciertos problemas para integrarse en el colegio.Cuando se enfada pierde los nervios y se vuelve bastante agresivo. Es un alumno inteligente y físicamente está más desarrollado que los niños de su clase.

Su profesor le castiga con frecuencia por pegar o insultar a sus compañeros. Ellos últimamente no quieren jugar con él en el recreo porque temen que termine pegándoles. Le cuesta mucho aceptar las normas de la clase como, colgar el abrigo enel perchero, él siempre lo tira al suelo, hasta que su maestro lo regaña.

Alberto suele coger las cosas sin pedirlas, y si alguien se opone utiliza su fuerza para conseguirlas. La semana pasada, estaban dibujando en clase, le dio un mordisco a una compañera porque quería el lápiz de color rojo que ella estaba usando.

Cuando le sale mal una tarea y tiene que repetirla se molesta, tira todolo que tiene encima de la mesa y se cruza de brazos, negándose a repetir la tarea.

Los padres de Alberto dicen que su hijo tiene mucho carácter pero que es muy cariñoso cuando está en su casa, por ello se encuentran muy sorprendidos de la actitud de Alberto porque ellos en casa no tienen problema con él. Se pelea de vez en cuando con su hermano mayor, pero dicen que son cosas normales entrelos niños.






DIAGNÓSTICO

Los problemas de comportamiento en el aula son, por muchos motivos, una de las áreas que más afecta o puede afectar no sólo al profesorado sino también al desarrollo armónico del niño. Constituyen un problema de elevada incidencia en el ámbito escolar y afectan al profesorado debido, fundamentalmente, a las implicaciones que tiene para la práctica docente. Elprofesor se ve obligado, en muchas ocasiones, a reorientar de forma más o menos drástica el programa de actividades en función de la conducta de algunos de sus alumnos.

Por otra parte, y como podemos ver en el caso de Alberto, aunque los problemas de comportamiento no son otra cosa que el modo en que el niño expresa su incapacidad para hacer frente a determinadas circunstancias, ellos en símismo acaban siendo un problema en la medida en que privan al niño de la interacción con sus compañeros (le llevan al aislamiento o al rechazo).

Alberto presenta rabietas, agresiones, apatías, desobediencia… todas estas conductas se aprenden del mismo modo que se aprende a prestar atención o a hablar, del ambiente, es decir, de las personas que le rodean. Así, cuando etiquetamos al niño ocuando realizamos atribuciones precipitadas y poco fundamentadas acerca de las causas de la conducta desadaptativa, en cierto modo estamos contribuyendo a que se mantenga e incluso empeore.

Para reafirmar su personalidad, el niño tiene tendencias agresivas. Esto no es malo, ya que la agresividad bien encausada resulta una cualidad. El niño necesita cierto grado de agresividad que le puede servital para subsistir. Iniciativa, coraje, deseo de superación, empuje y tenacidad, entre otras, son cualidades que pueden considerarse como aspectos de una agresividad positiva. Los triunfadores y líderes poseen estas cualidades.



Pero existe el niño agresivo realmente conflictivo. Su conducta es problemática y deja ver una ansiosa necesidad de autoafirmación y esto lo exterioriza a través dela violencia, como el niño de nuestro caso. Este tipo de niño es inseguro, lucha sin resolver sus conflictos y es por eso que su temperamento explosivo le hace pegar, romper, gritar y hasta insultar a quién se le ponga enfrente. El niño con este comportamiento sólo quiere que se enteren de que él existe.

Una de las causas más frecuentes de este comportamiento es que el niño se sienta...