Fuentes Del Derecho

Tarea fundamental del jurista es determinar qué es Ijurccho en cada caso concreto, qué normas son jurídicas y cuáles no lo son, y también averiguar su contenido. Para ello no se entrega a ninguna investigación filosófica sobre el Derecho en general sino que le basta con aplicar los criterios que cada sistema establece para fijar cómo se producen las normas jurídicas y cómo pueden ser conocidas.Estas formas de manifestación de las normas son lo que se denomina «fuentes del Derecho».
Cada sistema jurídico tiene su propio sistema de fuentes, aunque muchos de ellos son parecidos. Nuestro Derecho, como la mayoría de los derechos del continente europeo y -los de otros países que se han inspirado en ellos, entre los que encuentran algunos asiáticos y africanos, tiene como característica laprimacía de la ley entendida en sentido amplio como norma escrita y general emanada de un poder público y dirigida a regular la conducta de los individuos. En cambio, en el Derecho inglés y los que de él derivan (el norteamericano y, en general, e! de antiguos dominios y posesiones británicas) la situación es distinta: también la ley es la fuente principal en e! sentido de que sus normas prevalecensobre las" de cualquier otro origen; pero, ¡unto a ella y corno elemento más significativo, está la doctrina establecida por las sentencias de los tribunales que constituye la base del Common Law y de la Equity.
Si de los derechos internos pasamos ai Derecho internacional, es claro que ¡as fuentes básicas no son las leyes, que no existen, ya que no hay un poder superior
que las dicte, sino losacuerdos entre los Estados (los tratados) y la costumbre.
En los derechos históricos contemplamos también una gran variedad El Derecho rern;>j',o, en su época de esplendor, hacia el siglo II a.C., reconocía como fuentes de Derecho los acuerdos de las asambleas populares (leges v plcbisscita), las decisiones del senado (¿e-natus consulta), las órdenes.emanadas de los emperadores (consíitiilionesprincipis), los edictos u ordenanzas de los magistrados (es decir, de los ciudadanos revestidos de poder público), y la doctrina de los juristas, o sea, de los ciudadanos especializados en el estudio del Derecho. Pero su elemento más característico fue la última de las fuentes citadas, la doctrina de los juristas o jurisprudencia, pues de ella procedía la gran masa de las normas aplicables.
Unsistema de fuentes no es fruto del azar o del capricho, sino consecuencia de múltiples factores políticos, sociológicos e ideológicos. A través de ellos se traspa-renta un conjunto de ideas y de hechos dominantes de la comunidad de que se trate. El predominio de la ley revela la intensidad creciente del poder del Estado y de su organización y actividades frente a las formas espontáneas de creación delDerecho, como es la cojs-tumbre. El sistema de fuentes del Derecho internacional refleja su peculiar situación, carente de una autoridad central que lo cree y lo aplique. Aquí, como siempre, una consideración meramente formal de una cuestión jurídica (las fuentes del Derecho) es imperfecta e incompleta. Cierto es que al jurista práctico le interesa sobra-todo conocer cuáles son las particularesnormas aplicables a cada caso; pero si- quiere llegar a una comprensión más profunda de su actividad no pueden dejarle indiferente eses problemas que yacen a niveles más profundos que el de saber cuáles son las fuentes «formales» de! Derecho.
La consideración de lo que ha ocurrido en España desde la implantación del nuevo régimen constitucional es especialmente reveladora. En España se ha asistidoen los últimos años y especialmente a partir de la entrada en vigor de la Constitución de 1978, a un cambio espectacular en la organización 14del Estado^y de;las.

concepciones políticas que están en su base. De un' Estado autoritario y centralista se ha pasado a un Estado democrático y descentralizado. En el régimen anterior el poder de hacer las leyes residía en las llamadas «Cortes...