Gota a gota

Gota a gota.

La vida me agota. Duermo y no me apetece despertar. En los sueños es donde me encuentro mejor, donde todo ocurre lento, tranquilo, sin prisas; donde me escucho y escucho a la gente escuchándome. Tengo un deber, vivir para morir, como todos. Aunque cada vez más, me invade la sensación de no haber nacido aún, de que todo va a comenzar de un momento a otro. No después de la muerte,no. Entre la vida y la muerte. Entre el presente y el futuro. En un momento atemporal, mágico, inconsciente.
Los años pasan deprisa, ¿para quién? Para los despistados. Para mí, que soy yo, no pasan. Pasa la vida, a la espera de la muerte, a la espera de la palmada en el culo, del llanto, del primer llanto. No es un renacer o una reencarnación, sino un presente que espera ser descubierto, un “yo”imaginario que cambia, pero que nunca es. Permanece quieto, inmóvil, agazapado a la espera de que las puertas se abran y pueda ver la luz, la cara del médico, de la comadrona y por último de la madre; su propia cara frente al espejo, reconociéndose, queriéndose. ¡Y qué difícil es!
Proyectamos, planeamos que “yo” voy a ser tal o cual, que debes, que debo ser, pero, ¿qué debo ser? ¿Qué es? ¿Dóndeestá? Lo veo en sueños, por eso duermo, no por cansancio, no. Para verme, para verte, para vernos. Miro alrededor y todo es nada, así estoy... Miro adentro y veo que algo está a punto de pasar, pero no, no sucede. Frustración, sin duda.
Quiero un monte lleno de flores y árboles y un río, aunque sea de treinta metros, me da igual. Lo que importa son las flores, los árboles, el río; pero sobretodo, el que los ve, el que mira. Yo miro, lo veo, pero durmiendo. Despierto pensando que hoy puede ser el día en que rompa aguas y el parto me traiga al mundo. El día pasa y he traído yo al mundo, no al revés.
La gente, ¿quién es? ¿Quiénes son? ¿De dónde han salido? Solo sé que son veloces, rápidos, humanamente virtuales.
Frases sueltas, preguntas sueltas.
Me domina mi mundo, pero el mundoestá dominado por él, se domina. Quiere ir hacia allí, y vamos. Antes de nacer, iremos, llegaremos allí y luego... ¿luego qué? Proyectamos, planeamos, y como dijo aquel... ¿dónde está el futuro? ¿Lo dijo? Da igual, lo digo. Ya tendría que haber llegado, llega tarde, como siempre, como nunca. ¿Llegará? Nacerá.
Pierdo el tiempo, ¡basta!. Has de trabajar, has de producir, as de oros, as de picas, asde bastos, ¡basta, otra vez!. Las espadas a la espalda por si acaso, el macuto y a andar. Cuidado, te tientan, te venden, te explotan, te mandan, nos mandamos. Sutileza, que el burro sabe que es burro y que lo estas cargando. Ahora tienes que hablarle de otra manera, la vara ya no sirve, es maltrato, ahora tienes que hablarle de otra manera.
Pero, ¡cómo! ¿Aún hay burros? No, ahora somos todoscaballos blancos, bonitos, ¡qué melena, qué trote! ¡Al galope!...

Mira, un niño. Pero, ¿qué es lo que tiene en las manos? Ah, un mando, el mando. Está quieto, con los ojos muy abiertos, no me ve, no puede, ha de mandar. Tiene responsabilidades, no puede morir, no sabe lo que es la muerte; sabe mandar, matar. Se matará a él mismo, dale tiempo. Basta con que se enamore y todo habrá terminado.Soltará el mando para echarse las espadas a la espalda. Como todos, como yo, como nadie. Será el mejor, seguro; pero también el peor, seguro. Frustración, sin duda.

Ilusión, ilusiones, alucina. Visiones con gafas de culo de botella, de botella de vino, de sangre, de tu sangre. ¿Lloras? ¿Para qué? Eso, eso, desahógate, bebe vino, alucina. Borracho de amor, borracho de virtud, borracho de sueños,borracho de ilusiones, aborrezco el alcohol, me paso a las drogas, ¿tú te drogas? ¿Para qué? Eso, eso, desahógate.
Mira, mirándote me veo. Estás también a la espera, ¿verdad? Siéntate, ponte cómodo que eres el siguiente, el último, el primero, el anterior y el posterior, el único, único. Vas a ser niño otra vez, ¿te imaginas? Bueno, coge el mando a ver...
Llueve, un chaparrón, casi un diluvio,...