Gringasho y la sociedad
Páginas: 2 (304 palabras)
Publicado: 23 de abril de 2013
Gringasho y la sociedad
El tema Gringasho no es ajeno a la realidad de muchos adolescentes de las escuelas estatales que podrían convertirse, si no se previene, en delincuentes avezados ypeor aún, en temibles Gringashos.
Nuestro rol como docentes es formar y educar a los niños y adolescentes que recibimos cada año en las escuelas. Desde nuestras áreas pedagógicas y la tutoríapodemos complementar, reforzar y llenar los vacíos dejados por las familias. Es verdad que no podemos trabajar solos, se necesita el apoyo de un psicólogo para realizar un diagnóstico del perfildel estudiante “potencialmente en riesgo”, es decir, de aquel donde la familia se desentiende, ignora, carece de valores y principios universales o de aquellos niños abandonados por sus padres yacogidos por familiares con un haber delictivo, como lo ocurrido a Gringasho, quien había aprendido a robar desde los 12 años. Ellos llegan a las escuelas con las mismas actitudes matonescas yse convierten en líderes negativos que advierten su presencia en agresiones verbales o físicas, en las pérdidas de útiles escolares y pertenencias de las autoridades (profesores, tutores,directores). Todo esto es una alerta que no pasa desapercibida y que debemos contrarrestarla con normas de conviviencia sólidas elaboradas por ellos mismos, con mayor confianza, escucha y cimentando laautoestima.
Por tal razón, como maestros debemos propiciar un clima armónico en nuestras aulas, donde puedan verbalizar sus sentimientos frente a diversas situaciones y así, sensibilizarlosmostrándose tal y como son. Un maestro comprometido no solo debe ser observador, sino un agente de cambio asentándose en la toma de conciencia de cada uno de sus actos y en los valoresfundamentales que debe regir en cada ser humano como el respeto por uno mismo, por la vida y por los demás.
Jéssica Salva
Licencia en Educación
Especialidad de Lengua, Literatura y Comunicación
El tema Gringasho no es ajeno a la realidad de muchos adolescentes de las escuelas estatales que podrían convertirse, si no se previene, en delincuentes avezados ypeor aún, en temibles Gringashos.
Nuestro rol como docentes es formar y educar a los niños y adolescentes que recibimos cada año en las escuelas. Desde nuestras áreas pedagógicas y la tutoríapodemos complementar, reforzar y llenar los vacíos dejados por las familias. Es verdad que no podemos trabajar solos, se necesita el apoyo de un psicólogo para realizar un diagnóstico del perfildel estudiante “potencialmente en riesgo”, es decir, de aquel donde la familia se desentiende, ignora, carece de valores y principios universales o de aquellos niños abandonados por sus padres yacogidos por familiares con un haber delictivo, como lo ocurrido a Gringasho, quien había aprendido a robar desde los 12 años. Ellos llegan a las escuelas con las mismas actitudes matonescas yse convierten en líderes negativos que advierten su presencia en agresiones verbales o físicas, en las pérdidas de útiles escolares y pertenencias de las autoridades (profesores, tutores,directores). Todo esto es una alerta que no pasa desapercibida y que debemos contrarrestarla con normas de conviviencia sólidas elaboradas por ellos mismos, con mayor confianza, escucha y cimentando laautoestima.
Por tal razón, como maestros debemos propiciar un clima armónico en nuestras aulas, donde puedan verbalizar sus sentimientos frente a diversas situaciones y así, sensibilizarlosmostrándose tal y como son. Un maestro comprometido no solo debe ser observador, sino un agente de cambio asentándose en la toma de conciencia de cada uno de sus actos y en los valoresfundamentales que debe regir en cada ser humano como el respeto por uno mismo, por la vida y por los demás.
Jéssica Salva
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