Guillermo Lasso

El amor imposible de Guillermo Lasso

Guillermo Lasso es un hombre romántico. Vive amores cortos, pero muy intensos. ¡Cómo luchó hasta el final por mantener a su lado a su querido Auki! Él sabíaque juntos, como pareja, darían a luz a esa extraña criatura que es el estado plurinacional; juntos, unirían de una vez por todas a esta pequeña y disfuncional familia que llamamos Ecuador.
Pero nopudo ser. El amor es así. Como en novela barata, en esta historia tenía que haber algo que impida a la pareja quererse. Así que no podía faltar la familia mezquina que se opone al romance, esos suegrosde mente estrecha que siempre lo arruinan todo. ¡Cómo se horrorizaron al ver al humilde Auki en los brazos del rozagante y emprendedor Guillermo! Antes de que éste pueda llevárselo para siempre almalévolo reino de los banqueros, donde todo es codicia, dinero, y decadencia, la familia mezquina gritó al unísono: ¨Auki, detente… o quedarás desterrado para siempre¨.
Qué enternecedora debió ser laescena entre Auki y los suyos. Seguramente él les rogó que comprendan su decisión: Guillermo lo quería de verdad, tal como es. Porque Guillermo es un hombre capaz de ver más allá de las greñas y delcolor de la piel, y fijarse en lo que lleva en su corazón y en su cabeza.
La familia de Auki sufrió injusticias, es cierto. Pero se han aferrado tanto a sus traumas que éstos los mantienen encadenadosal pasado. Y siempre es más fácil odiar que amar. Especialmente en la política, donde no somos más que personajes estereotipados de una triste novela de pacotilla. Somos seres planos, unidimensionales,carentes de profundidad espiritual o amplitud mental. Somos el banquero corrupto, el periodista vendido, el indígena tirapiedras, el político ladrón, y un sinnúmero de clichés injustos que ustedpuede añadir a su gusto. Somos seres en blanco y negro, vulgarmente trazados por la brusca pincelada del epíteto. No somos seres humanos que reflexionan y se transforman. Somos personajes mediocres de...