Heráclito

SOBRE HERÁCLITO







Heráclito dispersa el sentido de la filosofía en tanto en cuanto disgrega el valor del rigor para establecer la base de la hermenéutica en el proceso de toda lahistoria de la reflexión.

Nada se puede afirmar si no se hace desde la dualidad de la realidad y del lenguaje. El estricto valor de la investigación científica se disuelve en el pensador griego hastaniveles insospechados, ya que nada queda cerrado, nada queda fuera. La contradicción no es tal, sino continuidad y búsqueda de sentido. Y no sólo del lenguaje, sino del meta lenguaje, que no es otra cosaque posicionamiento sobre la verdad que no puede ni debe ser solipsista.

Hombre, verdad, lenguaje, Dios, cosa, pensamiento, bien, justicia, todo y nada en el mismo sitio, abriendo la puerta delabismo incomprensible de la razón abierta que se sostiene, a veces, sobre ella misma. La vacuidad siempre presente rellenada con palabras en ocasiones y con el sentido necesitado en otras.Relacionamos hombre y lenguaje desde la intencionalidad lingüística y a la postre, filosófica, de manera análoga a como hacemos con Dios y su esencia o su ser en el caso de que coincidan.

Es el Dios de larazón y es la razón dialéctica, el logos se torna un dios experimentable.

La sabiduría es siempre dulce, sencilla pero llena de contenido; y por eso, plena de verdad.

Esta sencillez la otorga elauténtico conocimiento, que es como un viaje a Ítaca; el camino que deseamos recorrer no exento de dudas o de temor, de sueño y de esperanza, aquel mal que existía en el cofre de Pandora, pero quesiempre nos religa con nosotros mismos. El sabio lo conoce, y más: lo siente y lo siente en la contradicción porque nada es solo, es y no es, está y no está, se vive y no se vive, como las aguas en lasque no se sumergía el filósofo de Éfeso porque se consideraba a sí mismo un dios; y la sabiduría no está nunca en aquellos que afirman que la tienen, en los que se creen estandartes de algo, ni la...