Humano tachado

Concebir una naturaleza determinada es poner límites, es decir que se limita desde el vamos a un ser cuando se le dice lo que es.
De este modo pretender ajustar la libertad a una determinaciónmetafísica es limitarla, condicionarla a partir de la definición de la naturaleza leída de lo real.
Lo real, como aquello dado en sí mismo, como “naturaleza” independiente de la libertad básica esanulante de esta misma libertad, pues establece unos limites que dejan fuera de la humanidad a todo aquel que, en el ejercicio de la libertad, excede dichos límites.
Si la ética se construye a partir de lalectura de “lo que ya está ahí” anula la posibilidad de superar ese continente dado. Continente en el que, como en un frasco se encierra el ser humano precisamente por el hecho de serlo. Por ello espreferible y hasta necesario que no se limite nuestro ser a una humanidad determinada.
Por otra parte esta “visión estática de la realidad incambiable y cristalizada” que debe vivirse para alcanzarla felicidad, excluye del concepto de humano a aquellos que no la viven. Esta exclusión es la causante de la posibilidad de dejar fuera de la humanidad a cualquiera que no se encuadre dentro de losdeterminantes del concepto de lo humano.
Pero precisamente lo humano es la posibilidad de exceder los límites, razón por la que cada época y cultura se constituyo a partir de una serie de prohibicionesque determinaban y circunscribían a los hombres a dicha cultura, convirtiendo los límites en barreras a ser superadas.
Esta es la razón por la que “la idea de felicidad,... aparece la mayoría de lasveces llevándose mal con el deseo”, dado que la idea de felicidad concebida y prescrita por cada cultura determina a lo “humano”, limitando su condición de superador de los condicionantes.
Por esarazón el autor prefiere hablar de un “concepto tachado de lo humano” o de “habla ser” para poder superar la antinomia entre lo humano y lo no humano, en el sentido determinante antes descrito. Est es,...