Ing. Sistemas Computacionales

Educar para la vida La sociedad mexicana del siglo XXI se haya inmersa en un panorama que se manifiesta imperativo y sometido a los embates de un constante cambio históricocultural que se asocia implícita y explícitamente a los paradigmas educativos recientes y anteriores. Sin embargo, el periodo de la Ilustración marca un rumbo

en la humanidad, ya que los hombres de pensamiento liberal yenciclopedista hacen un intento por generar una reconstrucción social, partiendo de las propias necesidades que una comunidad exige a la clase político-gubernamental. Tales necesidades son el principio del establecimiento de distintas y variadas instituciones (puesto que la propia sociedad es una institución), como: la religión, la jurisdicción, la escuela. …“en la sociedad medieval no existía elconcepto de niñez”, (Aries 1962, p. 125). Podría parecer que esta expresión es el antecedente a lo planteado por J. Dewey: …“de modo que la experiencia infantil se pudiera relacionar con la conquista de la experiencia del mundo social.” Y entonces, en el comparativo, podemos observar que sociedad e instituciones han caminado al unísono para entender y comprender los dualismos que surgen como unainvariable explicación a lo dicho por Bernard Lonergan “hacer al humano más humano”. Un primer dualismo el cual se razona desde la perspectiva de comprender que en un principio del desarrollo natural y biológico del hombre, se nace Heterónomo; pero como el individuo se encuentra inmerso en una sociedad, no percibe la importancia que se sustenta en otros semejantes para la subsistencia, el aprendizaje yla socialización. Pero, para ejercer un influjo de superación que dé paso al siguiente acontecimiento se fortalece la existencia de la Escuela como institución formadora y educadora para la vida, lugar donde se relacionan docente y discente, uno como sujeto mediador y el otro como sujeto activo de su aprendizaje. Luego entonces, ¿cuál es la pretensión de vincular la escuela con la vida?

Larespuesta nos arroja entonces a un túnel del tiempo en donde nos encontraríamos con un mar de sistemas antiguos de educación, cuyo interés capital se basaran en mantener vivas las tradiciones del pueblo, en una suerte de preparación infantil para la vida. En la Grecia antigua, los grandes pensadores –Sócrates, Platón y Aristóteles, señaladamente- estaban convencidos de que uno de los propósitosfundamentales de la educación escolar era preparar a los jóvenes para las tareas del Estado y la sociedad. A principios de nuestra era, Séneca decía que un gran defecto es aprender más por la escuela que por la vida. Mucho después, en el siglo XVII, Comenio insistía enfáticamente en la necesidad de enseñar haciendo referencia a las “cosas concretas”. En el siglo XVIII, Rousseau pugnaba porque loseducandos estudiaran la naturaleza y la sociedad a través de la observación directa, y Pestalozzi dio continuidad funcional a este planteamiento pedagógico. Más adelante, Durkheim creería asimismo que la misión principal de la escuela era la de preparar a las generaciones jóvenes para su vida social y en la primera mitad del siglo XX teóricos y prácticos tanto de la escuela nueva como de la escuelaprogresista, con autores tan trascendentes como John Dewey y María Montessori, defenderían apasionadamente el postulado de una formación escolar sintonizada con las necesidades vitales de los alumnos. ¿A qué se debe entonces tan preocupante situación de entender la misión primordial de la escuela? ¿Acaso todo es consecuencia de la institucionalización escolar para satisfacer las necesidades dehumanización de la sociedad? Lo que nos interesa destacar es que la escuela proporciona posibles respuestas a las inquietantes preguntas que hemos planteado. O, mejor aún, posibles soluciones para la compleja problemática que dichas preguntas entrañan. De ninguna manera soluciones unívocas, exclusivas o mecánicas, pero sí propuestas para la reflexión y la acción que nos pueden orientar frente a este...