JOSÉ DE SAN MARTÍN

JOSÉ DE SAN MARTÍN

Héroe nacional de Argentina y Perú.

(Extracto del libro “El Santo de la espada”, por Ricardo Rojas.)

“Era San Martín un hombre de estatura mediana, aunque imponente por suestampa marcial. Tenía la tez trigueña. Su cabeza redondeábase en líneas armoniosas, fuertes; la nariz aguileña y los arcos ciliares de enérgico gesto. Los ojos negros, de mirada profunda, movíansecomo emboscados a la sombra de las cejas expresivas. Las manos eran huesudas y largas, de ademán elocuente; la marcha, a la vez ágil y firme; la actitud cautelosa o elegante, según las ocasiones; elgesto sobrio, sumiso siempre a la vigilante voluntad; la voz, rotunda y varonil. Reía poco; pero su sonrisa era graciosa en la boca pequeña, bien dibujada y bien dentada. Afeitábase el bigote y usabalargas patillas que peinaba hacia adelante, como lo hacía con el cabello, negro y lacio, traído sobre la frente. Escuchaba con interés, procurando en la conversación ponerse a tono con sus interlocutores,más atento a aprender que a deslumbrar. Con las damas era cortés, y sabía bailar, como cuadraba a un ex alumno del Seminario de Nobles, la escuela que cursara en Madrid, siendo niño. La vida militarhabía endurecido un tanto sus maneras, y a veces estalló en gestos de enojo; pero esto pasó en los cuarteles, jamás en los salones, en los que siempre se mostró con aires de afable y espontáneoseñorío. Guardaba con pudor sus afectos, esquivo a lo sentimental y a lo sensual. No había leido mucho, aunque sí lo necesario a su destino, y podía discurrir sobre historia, sobre filosofía, sobre pintura,aparte de sus temas de soldado.

“Creía en Dios, a quien siempre invocaba, y su filosofía fue la de un estoico; en algunas ocasiones citó a Epícteto, a Séneca, a Diógenes. Pensaba por su cuenta, conclaridad geométrica, y hablaba con precisión espartana, en frases breves, más bien lapidarias que líricas. Mostraba seguridad en sus opiniones, fundando sus juicios en los hechos. Conocía a los...