Juicio jesus

La historia por dentro
Pijao Editores, Ibagué, mayo de 1990
Sinopsis
Cuando el autor fue designado como director de la Revista de circulación nacional "Consigna", para suceder en el cargo al ex-Presidente de la República Carlos Lemos Simmonds, encontró que éste había fundado una sección que bautizó "La historia por dentro", donde se analizaban hechos del pasado, pero enfocados desde unaperspectiva diferente. Ortiz Vidales decidió continuar con la tarea y se impuso el trabajo de escribirla él mismo, pero relacionando siempre las ocurrencias del pasado con hechos contemporáneas de vigencia periodística, de ahí sus crónicas sobre Bolívar y la humanización de la guerra, de los 450 de la fundación de Bogotá, los 200 años de la proclamación hecha por los revolucionarios franceses en 1.789de la "Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano", estudios históricos esto que tuvieron buena acogida entre los lectores de la época.
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Capítulo II: El Proceso de Jesús. Contexto político y judicial de un drama histórico
Luego de tres meses de implacable asedio militar, las poderosas máquinas de guerra, empezaron a romper las murallas que rodeaban la ciudad deJerusalén. Esto ocurría en el año 63, antes de la Era Cristiana y pocos días después las tropas de Pompeyo, compañero de Craso y Julio César en el triunvirato que gobernaba en aquel momento el inmenso Imperio Romano, penetraban victoriosas en la Ciudad Santa de los judíos.
Mientras en las calles yacían millares de cadáveres de frustrados defensores y algunos todavía preferían matarse entre sí, antesque rendirse, el general vencedor, rodeado de su guardia, buscó el templo de la ciudad y penetró en el recinto. No encontró ídolos, ni imágenes, ni riquezas suficientes para justificar un saqueo, y pronto lo abandonó, no sin antes prohibir su profanación y autorizando la reanudaci ón de los sacrificios rituales de los judíos.
Comenzaba así un gobierno romano sobre Palestina que habría deprolongarse por espacio de cuatro siglos. Por medio de reyezuelos y de gobernantes títeres, el Imperio se las arregló para mantener su predominio sobre una región que constituía punto neurálgico en la vía comercial y militar que unía a Europa con Asia y África por mar y tierra y país de contención entre dos potencias enemigas de Roma, el poderoso Reino de los Partos y el de los Nabateos.
Se impone elimperialismo romano
Pero para conseguir tal propósito, era indispensable primero, consolidar la estabilidad política de Palestina. La mayoría del pueblo judío, hostil desde el principio a sus nuevos dominadores, llegó a convertir la región, en una de las provincias más difíciles de gobernar de todo el gran Imperio.
Bastó la llegada del primer Procurador Romano para que entablara un alzamiento enJerusalén y pronto el incendio se extendió por toda Palestina. En Séforis la capital del Galilea, la rebelión fue acaudillada por Judas llamado el "Gaulonita", extraña mezcla de profeta religioso y líder guerrero. Su conato no resistió mucho tiempo, la feroz acometida de las legiones romanas y la mayor parte de sus seguidores se dispersaron y tan solo un puñado de testarudos insistieron en formarun grupo rebelde clandestino que recibió el nombre de los "Zelotas".
De nada valieron las sangrientas represiones decretadas por los invasores, pues aunque la ciudad de Séforis fue incendiada y arrasada hasta en sus cimientos, la mayoría de los judíos continuaron oponiéndose a la dominación extranjera. Pero no existía acuerdo entre ellos sobre la forma de adelantar la resistencia. Mientras lasorganizaciones de patriotas, con los "Zelotas" a la cabez a, actuaban en esporádicas guerrillas desde los montes de Galilea y preparaban una insurrección general que tan sólo vendría a estallar sesenta años más tarde, a pocas leguas de allí, en un santuario levantado a orillas del Mar Muerto, los miembros de la secta de los "Esenios" esperaban pacientes la llegada de un "Libertador Celestial". Y...