LA CONSTRUCCIO N SOCIAL DE LA REALIDAD 3

¿Realidad?, ¿Cuál realidad?

Por: Erika Romero y Maria Camila Tafur


“No estoy loco, simplemente
mi realidad es diferente a la tuya”

—Lewis Caroll, Alicia en el país de las maravillas


Berger, P. L. y Luckmann T. (1999) La construcción social de la realidad, Buenos Aires: Amorrortu Editores
Al inicio del libro los autores dejan claras sus tesis; ya en el primer párrafo de la introducciónlas mencionan: “que la realidad se construye socialmente y que la sociología del conocimiento debe analizar los procesos por los cuales esto se produce.”[13], a lo largo de ésta lo que hacen es argumentar por qué su visión de lo que es la sociología del conocimiento difiere de la que tenían sus propios creadores Scheler y Mannheim y los sociólogos que vinieron después de ellos. Argumentan,citando a cada uno de los autores y sus principales obras relacionadas con la sociología del conocimiento1, que ellos se han interesado y se han centrado más “en el plano teórico sobre cuestiones epistemológicas y en plano empírico sobre cuestiones de historia intelectual” [28] y esto ha dificultado que se avance en lo que para ellos debe ser la verdadera ocupación de la sociología del conocimiento: “lasociología del conocimiento debe, por tanto, ocuparse de la construcción social de la realidad”. [31] Por este motivo, resuelven dejar a un lado las cuestiones metodológicas y epistemológicas, aclarando además que esas cuestiones atañen a la filosofía no a la sociología, por tanto esta última no puede dedicarse a resolverlas “lo que sostenemos aquí es que tales cuestiones, de por sí, no formanparte de la disciplina empírica de la sociología. Corresponden en realidad a la metodología de las ciencias sociales, cometido que atañe a la filosofía y que por definición es distinto de la sociología, la cual es, por cierto, objeto de tales investigaciones. La sociología del conocimiento, (…) “alimentará” con problemas esta investigación metodológica. Pero no puede resolver estos problemasdentro de su propio marco de referencia.”[29].
Al final de la introducción; y esto es muy importante, los autores sostienen que Durkheim y Weber no se contradicen en sus consignas2 pues “es justamente el carácter dual de la sociedad en términos de facticidad objetiva y significado subjetivo lo que constituye su “realidad sui generis”3[35] eso significa que para apreciar adecuadamente la realidad suigeneris de la sociedad se requiere indagar la manera en que la realidad está construida, y esa es la senda en la que, afirman los autores, se quieren adentrar en el libro.
En la primera parte del libro, los autores precisan qué es la realidad de la vida cotidiana; no sin antes, reconocer que existen otras realidades, como la realidad de los sueños. Sin embargo, la vida cotidiana es consideradapor el ser humano como la realidad suprema, pues ésta se experimenta en un estado de plena vigilia. También, “la vida cotidiana, se presenta ya objetivada” [39], afirman los autores, argumentando que cuando aparecemos en este mundo los objetos que componen la realidad ya han sido designados, por tanto no requiere verificación, sino la asumimos como realidad sin más; aunque se nos presenten dudassiempre volvemos a ella “Sé que es real. Aun cuando pueda abrigar dudas acerca de su realidad, estoy obligado a suspender mis dudas puesto que existo rutinariamente en la vida cotidiana.”[41]
Según Berger y Luckmann, la realidad está organizada alrededor de una estructura espacial y una temporal, cada persona experimenta de manera distinta estas estructuras. Los autores aclaran que en lo querespecta a su propósito es más importante hablar de la estructura temporal, y dicen sobre ésta: “la temporalidad es intrínseca a nuestra propia conciencia. El torrente de la conciencia está siempre ordenado temporalmente.(…) Todo individuo tiene una conciencia de un fluir interior del tiempo”[44]. Sin embargo existe en la vida cotidiana una hora oficial que es intersubjetiva y nos hace ser conscientes...