La etica del PSA LACAN

Lacan: Libro 7: “La ética del PSA” (de este libro el profesor pidió 3 capítulos)
Cap: XXII: La demanda de felicidad y la promesa analítica :
En el informe q presenté de “La dirección de la cura” digo en alguna parte q el analista tiene q pagar algo para sostener su f(x), así paga con:
-palabras: sus interpretaciones
-su persona: en la medida en q, x la transferencia, es desposeído de ella.-con un juicio en lo conceniente a su acción (esta es una exigencia mínima).
El análisis es un juicio, es exigible en otros lados, pero si puede parecer escandaloso avanzar esto aquí, es xq desde cierto ángulo, el analista tiene altamente Cc de q no puede saber qué hace en psicoanálisis; una parte de esa acción permanece velada para él mismo.
Esto justifica el pto donde se abre la pregunta desaber cuáles son las consecuencias éticas generales q entraña la relación con el ICc tal como lo descubrió Freud.
La práctica del análisis y sus problemas técnicos no podrían ser resueltos sin ciertos recordatorios: primera// ¿el final del análisis es lo q se nos demanda? Lo q se nos demanda es la felicidad; el asunto no se ve facilitado debido a q la felicidad devino un factor de la política,esto es lo q me hizo llegar al comentario: “no podría haber satisfacción para nadie fuera de la satisfacción de todos”
Recentrar el análisis en la dialéctica presentifica para nosotros q la meta aparece indefinidamente aplazada; no es culpa del análisis si la cuestión de la felicidad no se pued articular de otro modo en la hora actual; en la medida en q, la felicidad se transformó en un factor dela política, para nosotros, no tiene una solución aristotélica posible y la etapa previa se situa a nivel de la satisfacción de las necesidades para todos los hombres.
Mientras q Aristóteles elige e/ los bienes q le ofrece al amo y le dice q sólo algunos de esos bienes son dignos de su devoción, a saber, la contemplación, la diléctica del amo está desvalorizada para nosotros x razones q se debenal moemento histórico q vivimos y q se expresan en la política ½ t la siguiente fórmula: “no podría haber satisfacción para nadie sin la satisfacción de todos” .
El análisis aparece en este contexto, y el analista se ofrece a recibir la demanda de felicidad.
Hay en Aristóteles una disciplina de la felicidad, muestra los acminos x los q piensa conducir a cualquiera q lo siga en su problemática yq, en cada act posible del hombre, realizan una f(x) de la virtud; esta virtud se obtiene x una mesótes, q está lejos de ser tan sólo un medio justo, un proceso ligado al principio de la evitación de todo execeso, sino q debe permitir al hombre elegir aquello q razonablemente puede hacerlo realizarse en su propio bien.
Observen q no hay nada semejante en el análisis; una sola cosa alude a unaposiliada feliz de la satisfacción de la tendencia, la nocion de sublimación, pero al tomar su formulación más esotérica en Freud, cuando nos la representa como realizada por la act del artista, esto quiere decir la posibilidad para el hombre de transformar sus deseos en comerciables, vendibles, bajo la forma de productos.
La otra formulación consiste en decirnos que la sublimación es lasatisfacción de la tendencia en el cambio de su Oº, sin represion, definición mas profunda pero q habre una problemática mas espinosa, si lo q les enseño no les permitiese ver dónde está la liebre.
En efecto, el conejo q hay q sacar de la galera ya está en la tendencia; ese conejo no es un nuevo Oº, es el cambio de Oº en si mismo. Si la tendencia permite el cambio de Oº, es xq ella ya está marcada x laarticulación del ste.
En el grafo del deseo, la tendencia, situada a nivel, de la articulación ICc de una sucesión ste, esta constituida x éste hecho en una alienación fundamental; tbn x este hecho, c/u de los ste q componen esa sucesión típica esta ligada por un factor común.
En la definición de la sublimación como satisfacción sin represión hay, implícito o explicito, reconocimiento de: q es...