La Mistica De La Feminidad
Páginas: 8 (1906 palabras)
Publicado: 29 de septiembre de 2011
Comentario “La Mística de la Feminidad” de Betty Friedan
En La mística de la Feminidad Betty Friedan (1963) se propone el análisis de la mujeres en la sociedad de Estados Unidos en la década de los 50 del siglo XX. Momento en el cual, después de la consecución de grandes logros a nivel legal para la igualdad de las mujeres, se da una revaloración del rol tradicional de ama de casa.
Lamujer a la que aboca su estudio es la madre de familia, de raza blanca, de clase media-alta, que tiene estudios superiores y que vive en las zonas residenciales del contexto urbano. Situación que tiene implicaciones serias para interpretar las conclusiones a las que llega, porque éstas no serán generalizables a todas las mujeres norteamericanas. Para lograr su objetivo Friedan realizó entrevistas amujeres, editores de revistas, escritores, educadores, médicos, psicólogos, etc. valiéndose de sus habilidades de periodista. El objetivo de la autora consistió en desvelar las razones que se encontraban detrás del hecho de que estas mujeres hubieran vuelto a adjudicarse, aparentemente tan de buena gana, el rol de ama de casa.
En apariencia estas mujeres eran las más afortunadas del mundoporque disfrutaban de los logros políticos y sociales que la lucha de las sufragistas habían hecho posible tiempo atrás, además de una situación económica desahogada que les permitía tener acceso a todos los avances tecnológicos que hacían sus trabajos de ama de casa más fáciles. Pero lo más importante: eran reconocidas y valoradas, incluso idealizadas, socialmente en su papel de amas de casa.
Milesde voces autorizadas aplaudían su feminidad, su compostura, su nueva madurez. Todo lo que tenían que hacer era dedicarse desde su más temprana edad a encontrar marido y a tener y criar hijos.
Como amas de casa y madres eran respetadas en la misma forma que lo eran sus maridos en su mundo (Friedan, 1963, p. 30).
A esta concepción estereotipada, idealizada y esencialista de la mujer es a loque la autora denomina, con bastante ironía, “la mística de la feminidad”. A lo largo del libro Friedan deja en claro la contribución que, en la exaltación de la mística, tuvieron los medios de comunicación, entre ellos las revistas femeninas de la época, presentando un modelo de mujer que despreciaba a las que buscaban sentirse plenas a través de una carrera profesional y ensalzaba a aquellas queencontraban su realización en el seno de su hogar como amas de casa.
A pesar de que todo el mundo, expertos de muchas disciplinas y la gente común, afirmaba que esa era la condición idónea para que las mujeres se sintieran plenas y felices en las entrevistas salieron a relucir los sentimientos de vacío, frustración, inconformidades e insatisfacciones que las propias amas de casa en su confusiónno se encontraban en condiciones de precisar, lo que Friedan llamó “el problema que no tiene nombre”.
Friedan encuentra la causa al problema que no tiene nombre en la represión que sufrieron estas mujeres para desarrollar su identidad libremente. Y sostiene:
El problema que no tiene nombre en la mente de tantísimas mujeres de hoy no es un asunto de pérdida de feminidad o de excesivaeducación, o de exceso de trabajos domésticos. Es mucho más importante de lo que todos creen (op cit, p. 46).
…el fondo del problema de la mujer de hoy no es sexual, sino de personalidad; una atrofia o interrupción de su desarrollo perpetuada por la mística de la feminidad…tampoco nuestra época permite a la mujer satisfacer su necesidad básica de crecimiento y sus exigencias como ser humano (op cit, p.93).
Para la autora el sustrato de esta mística tiene su origen en el psicoanálisis, en la manera en que se permeo a toda la cultura de Estados Unidos de aquella época y llegó a conformar una idea de normalidad con relación a lo debería ser la feminidad. Cita a Freud:
La verdadera feminidad sólo queda establecida cuando “el deseo del pene” es reemplazado por el “deseo de hijo”.
La...
En La mística de la Feminidad Betty Friedan (1963) se propone el análisis de la mujeres en la sociedad de Estados Unidos en la década de los 50 del siglo XX. Momento en el cual, después de la consecución de grandes logros a nivel legal para la igualdad de las mujeres, se da una revaloración del rol tradicional de ama de casa.
Lamujer a la que aboca su estudio es la madre de familia, de raza blanca, de clase media-alta, que tiene estudios superiores y que vive en las zonas residenciales del contexto urbano. Situación que tiene implicaciones serias para interpretar las conclusiones a las que llega, porque éstas no serán generalizables a todas las mujeres norteamericanas. Para lograr su objetivo Friedan realizó entrevistas amujeres, editores de revistas, escritores, educadores, médicos, psicólogos, etc. valiéndose de sus habilidades de periodista. El objetivo de la autora consistió en desvelar las razones que se encontraban detrás del hecho de que estas mujeres hubieran vuelto a adjudicarse, aparentemente tan de buena gana, el rol de ama de casa.
En apariencia estas mujeres eran las más afortunadas del mundoporque disfrutaban de los logros políticos y sociales que la lucha de las sufragistas habían hecho posible tiempo atrás, además de una situación económica desahogada que les permitía tener acceso a todos los avances tecnológicos que hacían sus trabajos de ama de casa más fáciles. Pero lo más importante: eran reconocidas y valoradas, incluso idealizadas, socialmente en su papel de amas de casa.
Milesde voces autorizadas aplaudían su feminidad, su compostura, su nueva madurez. Todo lo que tenían que hacer era dedicarse desde su más temprana edad a encontrar marido y a tener y criar hijos.
Como amas de casa y madres eran respetadas en la misma forma que lo eran sus maridos en su mundo (Friedan, 1963, p. 30).
A esta concepción estereotipada, idealizada y esencialista de la mujer es a loque la autora denomina, con bastante ironía, “la mística de la feminidad”. A lo largo del libro Friedan deja en claro la contribución que, en la exaltación de la mística, tuvieron los medios de comunicación, entre ellos las revistas femeninas de la época, presentando un modelo de mujer que despreciaba a las que buscaban sentirse plenas a través de una carrera profesional y ensalzaba a aquellas queencontraban su realización en el seno de su hogar como amas de casa.
A pesar de que todo el mundo, expertos de muchas disciplinas y la gente común, afirmaba que esa era la condición idónea para que las mujeres se sintieran plenas y felices en las entrevistas salieron a relucir los sentimientos de vacío, frustración, inconformidades e insatisfacciones que las propias amas de casa en su confusiónno se encontraban en condiciones de precisar, lo que Friedan llamó “el problema que no tiene nombre”.
Friedan encuentra la causa al problema que no tiene nombre en la represión que sufrieron estas mujeres para desarrollar su identidad libremente. Y sostiene:
El problema que no tiene nombre en la mente de tantísimas mujeres de hoy no es un asunto de pérdida de feminidad o de excesivaeducación, o de exceso de trabajos domésticos. Es mucho más importante de lo que todos creen (op cit, p. 46).
…el fondo del problema de la mujer de hoy no es sexual, sino de personalidad; una atrofia o interrupción de su desarrollo perpetuada por la mística de la feminidad…tampoco nuestra época permite a la mujer satisfacer su necesidad básica de crecimiento y sus exigencias como ser humano (op cit, p.93).
Para la autora el sustrato de esta mística tiene su origen en el psicoanálisis, en la manera en que se permeo a toda la cultura de Estados Unidos de aquella época y llegó a conformar una idea de normalidad con relación a lo debería ser la feminidad. Cita a Freud:
La verdadera feminidad sólo queda establecida cuando “el deseo del pene” es reemplazado por el “deseo de hijo”.
La...
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