La Pena De Muerte
La pena de muerte, también conocida como la pena capital es "la sanción
jurídica capital,
mas rigurosa de todas, consistente en quitar la vida a un
condenado mediante los
procedimientos
y órganos de ejecución establecidos
por el orden jurídico que la instituye".
El concepto pena de muerte tiene muchas definiciones; Para personajes como Antonio José Restrepo, Manuel Murillo Toro, los
hermanos Samper, es la forma más infame y retrógrada del Estado para
sancionar a los delincuentes.
Para Raúl Carrancá y Trujillo, es "un tratamiento que el Estado impone a un
sujeto que ha cometido una acción antisocial o que representa una peligrosidad social, pudiendo ser o no ser un mal para el sujeto",
Para Franz Von Lizt, "es el mal que el juez infringe al delincuente a causa de un
delito, para expresar la reprobación social respecto al actor y al autor".
Fernando Castellanos Tena e Ignacio Villalobos "es un
castigo
legalmente
impuesto
por el Estado al delincuente, basado en la ley para
conservar un orden jurídico"
Son muchas las consideraciones y opiniones que se tienen acerca de la pena
de muerte para unos es un castigo o un mal contra el delincuente que comete
la falta, Para otros es la forma en que la ley mantiene una estabilidad en la
sociedad, pero en sí, la pena de muerte resulta ser una medida equivocada y
un castigo inútil ya que no resuelve nada y resulta contradictorio para aquellos
que dicen defender la vida.
Son muchos los castigos que pueden generar impacto en la sociedad y lograr
la justicia anhelada sin recurrir al límite de la contradicción.
Aplicar la pena de muerte como medida de defensa ante la violencia y el crimen
inminente que se vive en la actualidad es llegar al límite del absurdo humano y
el colmo de la arrogancia de un sistema judicial que busca castigar las
injusticias; reflejando un alto grado de irracionalidad por parte de los “seres
humanos, inhumanos” definiendo inhumanos como: la persona o la acción que
es cruel y despiadada.
Y más aún, si se tiene en cuenta que no hay ninguna evidencia de que la pena
de muerte evite el delito como defensa de la sociedad, ninguna comisión científica ha podido demostrar que las ejecuciones tengan efecto disuasorio, o,
¿A caso en países como China, Japón. Brasil y otros tantos que aún las
mantienen en vigor se ha abolido la violencia por completo o por lo menos en
un alto índice? No.
Según estudios realizados, la pena de muerte no reduce el crimen en mayor
medida que la cadena perpetua; entonces, para qué disponer de la vida de las
personas sabiendo que lo logrado por este hecho se puede lograr con uno
menos cruel y que no viola dos de los derechos fundamentales de los seres
humanos: El derecho a la vida y el derecho a no ser sometido a penas crueles,
inhumanas o degradantes ambos reconocidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Aunque
la cadena perpetua no brinda mayores oportunidades es más
asequible que la pena de muerte, ésta por lo menos permite a los condenados
ver una luz al final del túnel, guardar una esperanza, ofrece tiempo para
pensar, reflexionar, amar, arrepentirse y quizás para crear algo en pro de la transformación del mundo; un ejemplo muy claro es: Un periodista condenado a
la silla eléctrica por haber matado a un policía que perseguía a su hermano, y
que lleva 18 años en el “corredor de la muerte” tiempo en el cual ha escrito
varios libros en los que critica el sistema judicial estadounidense.
Agregando, que no hay ningún tribunal humano que garantice imparcialidad y
certeza ...
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