La Tradición republicana del buen gobierno.

La Tradición republicana del buen gobierno.
Capítulo I Tradición Colonial y nuevo orden político.
Para México, el fin de la colonia trajo consigo distintos conflictos políticos centralessobre la mejor manera de regirse sin un gobierno colonial, es decir, ponerse de acuerdo en las formas y condiciones para una convivencia como nación independiente. El reflejo de esto esevidente en nuestra historia prácticamente el primer siglo de vida como nación estuvo lleno de conflictos sociales y militares que no permitieron concretar la base una de un gobierno fuerte yconsolidado como se había propuesto desde la constitución de 1824.
Sin embargo las altas esferas de conflicto político no se reflejaron en las bases, los municipios, instrumentos de gobierno endonde se realizaba la vida cotidiana de cada uno de los pobladores cercanos o pertenecientes a estos. La dinámica social desarrollada en cada uno de estos lugares aprovecho los cambios políticoscentrales para tomar terreno y afianzar su forma de organización de usos y costumbres, la adopción de vecinos y la elección de sus representantes ante ellos y para con el exterior delmunicipio.
Esto último se caracterizó por la puesta en orden y adopción de métodos electorales específicos dependiendo de su región o adopción de acuerdos, apoyados en las formas coloniales degobierno pusieron en marcha los cambios de administración municipales que se depositaban en personas prestigiosas o con profesionistas destacados que a su vez se encargarían de elegir a los actoresque se desempeñarían como sus gobernantes, sentando así el principio de cambio de representantes. Para la autora, estos movimientos políticos forjaron los entramados que darían como resultadolos reconocimientos estatales y por último la reafirmación de una identidad nacional, es decir, la adopción de dos ciudadanías, como originario de una cabecera municipal y como mexicano.