las competencias; razones y sinrazones

LAS COMPETENCIAS: RAZONES Y SIN RAZONES

Por Gustavo Rincón G.

Leito, mi madre estudio hasta tercero de primaria, aprendió a leer y escribir y las operaciones básicas de la matemática así como algunos rudimentos de historia y geografía; hace poco conocí la escuela donde estudio mi madre: es una vieja casona blanca de muros gruesos de adobe al lado del camino veredal, rodeada de vistososjardines, junto al patio se conserva todavía el asta donde se colocaba la bandera nacional. Mi madre me habla con nostalgia de su escuela, de su maestra, de la larga jornada que tenía que caminar para llegar a ella, de la merienda que le daban para el día, de los castigos que le imponían, y de las muchas cosas que le enseñaba su maestra: los valores cívicos, las normas de urbanidad, la historiapatria. Eran otros tiempos y la educación tenía otras intensiones. A mi madre, por ejemplo, le hablaron mucho de los próceres de la patria y de los símbolo patrios, ya que la reforma educativa de comienzos de siglo realizada por Pedro Nel Ospina promovía, desde la escuela, la identidad y unidad nacionales a través del reconocimiento de una historia y unos símbolos comunes, luego de las luchasentre liberales y conservadores que culminaron con la separación de Panamá.

No sin razón Coy (2008) sostiene que desde los griegos hasta hoy, la educación ha sido una tarea intencionada ya que obedece a distintos intereses económicos, sociales y políticos, propios de la época que se vive. La educación que recibió mi madre no tenía mayores pretensiones: unos saberes básicos, unos valoreséticos que garantizarán cierta cohesión social, unas normas de comportamiento y el reconocimiento de la noción de patria, una patria que ha duras penas superaba la violencia del 48 y a la que acababa de llegar la televisión. Hoy, varias décadas después, en plena globalización, cuando algunos incluso hablan de la sociedad postmoderna y de la sociedad del conocimiento, la escuela continua ejerciendo unpapel fundamental dentro de los procesos sociales y de reproducción cultural y es el único lugar, (Mockus, 1995) en el que la cultura puede ser intervenida y reorientada. Pero al igual que la sociedad se transforma, la escuela también debe transformarse y asumir los nuevos retos y realidades que la interpelan.

Con la pretensión de actualizar la escuela y adaptarla a las nuevas realidades elMinisterio de Educación Nacional asume el Modelo de las Competencias como política nacional educativa. Este será el enfoque que transformará la escuela colombiana, que formará a las nuevas generaciones de colombianos y que nos introducirá de lleno en los goces de la globalización y de la sociedad del conocimiento. Luego de varios años de ejercicio docente en el marco de las competenciasreconozco que, en efecto, las éstas han propiciado transformaciones importantes en la escuela colombiana, especialmente en lo que hace referencia al lugar que ocupa el conocimiento en este enfoque, el rol jugado por el docente en el proceso educativo, así como la nueva cultura que se teje en torno a la evaluación. No obstante, es necesario reconocer también el dejo de incertidumbre que deja el enfoquepor competencias, en torno a algunos aspectos no reconocidos ni tomados en cuenta en las grandes discusiones y reflexiones que se hacen en torno a la escuela del siglo XIX por parte de distintos actores.

Las nuevas tendencias pedagógicas por lo general suscitan amplios debates y profundas reflexiones y muchas veces las vemos con carácter mesiánico. En el caso del enfoque por competenciases importante destacar, en primer lugar, la reflexión suscitada en torno al conocimiento y los contenidos curriculares que debe manejar la escuela, el qué debe aprender el niño y el joven se convierte en una pregunta fundamental. Ese qué no es un todo aislado e independiente sino que se da dentro de un contexto determinado en el que se supera ese viejo concepto de la tabula rasa. Tobón afirma...