las venas abiertas de america latina
La economía norteamericana necesita los minerales de América latina como los pulmones necesitan el aire.
El petróleo sigue siendo el principal combustiblede nuestro tiempo, y los norteamericanos importan la séptima parte del petróleo que consumen.
Los Estados Unidos compran fuera de fronteras una quinta parte del cobre que gastan. La falta de cincresulta cada vez más angustiosa: cerca de la mitad viene del exterior. No se puede fabricar aviones sin aluminio, y no se puede fabricar aluminio sin bauxita: los Estados Unidos casi no tienen bauxita.Sus grandes centros siderúrgicos no encuentran hierro suficiente en los yacimientos de Minnesota, los cuales están en camino de agotarse, ni tienen manganeso en el territorio nacional, la economíanorteamericana importa una tercera parte de hierro y todo el manganeso que necesita, además de importar la cuarta parte del tungsteno, necesario para la fabricación de cohetes.
Esta dependencia,creciente, respecto a los suministros extranjeros, determina una identificación también creciente de los intereses de los capitalistas norteamericanos en América Latina, con la seguridad nacional de losEstados Unidos. La estabilidad interior de la primera potencia del mundo aparece íntimamente ligada a las inversiones norteamericanas en América Latina. Cerca de la mitad de esas inversiones estádedicada a laextracción de petróleo y a la explotación de riquezas mineras, indispensables para la economía de los Estados Unidos tanto en la paz como en la guerra.
El subsuelo también produce golpes deestado, revoluciones, historias de espías y aventura en la selva amazónica.
En Brasil los yacimientos de hierro del valle de Paraopeba tiraron a dos presidentes, Janio Quadros y João Goulart,antes de que el mariscal Castelo Branco, que asaltó el poder en 1964, los cediera a la Hanna Mining Co.
Años antes el presidente Eurico Dutra (1946-51) había concedido a la Bethlehem Steel, los...
Regístrate para leer el documento completo.