Leer Antes De Leer

“Leer” antes de leer
Autora: Prof. Georgina Arias Leyva
“...No puedo decirle a alguien que le gusta bucear: ¿ por qué no quiere leer un libro? Podría contestarme con toda la legitimidad del mundo: ¿ y a usted, no le gusta bucear? Cada quien tiene sus estímulos. Claro está, que si de niño comienzo a bucear, habrá más probabilidades de que me guste más tarde (...)” José Saramago

El encuentrodel niño con la lengua escrita se inicia mucho antes de entrar este en contacto con la lectura como tal cuando comienza su aprendizaje formal en la escuela. Con anterioridad a este momento, él tiene conocimiento sobre el sistema de escritura y la práctica de la lectura, aunque, por supuesto, no son estos saberes convencionales. El gusto por la lectura se puede fomentar en el niño desde muytemprano, aún antes de que comience a asistir a la institución escolar, todo depende del ambiente “lector” que lo rodee, y en esto son determinantes todas las personas que se relacionan con él. Corresponde por tanto a la familia y a los primeros maestros propiciar el primer acercamiento a los libros y crear la necesidad de “leerlos” prediciendo su contenido a partir de la información visual que puedaobtener mediante la exploración de estos materiales escritos. Aquellos niños que tienen contacto frecuente con libros y con personas que leen y escriben en su presencia, sin dudas, se sienten más motivados hacia estas actividades; en este sentido la familia antecede a cualquier otra institución educativa. Es fundamental, entonces, que se pongan a su alcance libros, revistas y otros materiales, que, deeste modo, comenzarán a ser considerados compañeros imprescindibles. Se requiere en primer lugar de una “ atmósfera literaria”: libros en la casa, en el aula, en la biblioteca; de distintos géneros y temáticas, grandes y pequeños, cortos y extensos, con ilustraciones claras, de pocos elementos, llamativos por

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su cubierta y diseño, libros que inciten a explorar, que les hagan sentirtristeza, alegría, miedo, en fin, que despierten la emoción del niño acompañado por la actitud cómplice del adulto. Es preciso además, de la presencia de personas que lean, que demuestren con su ejemplo, que leer entretiene, divierte. El disfrute de la lectura por parte de los que rodean al niño, es evidencia para él de que esta puede ser una actividad tan placentera como el juego, con la cual puedetambién ocupar su tiempo. Incluso si estas personas no han sido hasta entonces lectores entusiastas, pueden a partir de este momento, entregarse más a la lectura. El adulto ha de constituirse en mediador entre el niño y el libro, inicialmente como actividad lúdica, buscada y no impuesta; pero que sea esta una experiencia enriquecedora, inteligente, de descubrimiento, donde se complementen la labordel hogar y de la escuela, si es que se trata de escolares ya institucionalizados, que a partir de lo logrado en el seno de la familia como espacio relevante en el logro de hábitos perdurables de lectura, se intensifique este trabajo en el medio escolar. Es preciso tener en cuenta los intereses y motivaciones de los niños; los libros tridimensionales acortan el camino entre el juguete y el libro,y, de preferencia, libros sólidos, manejables que, inicialmente deben manipular bajo el control y la dirección del adulto Se requiere, además, dejar los libros al alcance de las manos del niño, que estos lleguen a ser para él un objeto que habla, informa y divierte. En la casa, poseer un espacio para guardar “sus libros”; en el aula, crear el rincón del libro, con una mesa o un simple estanteabierto como punto de partida, para que se puedan observar y “manosear” los textos globalmente, mirar su formato, escudriñar las letras por cuanto es este un período de desarrollo sensorial y acostumbrar a los pequeños “lectores” a cuidarlos, a repararlos colectivamente si estos se dañan, pero sin temor al deterioro natural e inevitable por el uso, ni siquiera a la pérdida; cuando se logra que ellos...