“Los Chicos Y Los Grandes, La Subjetividad En Juego”

Psicología Educativa II
UNR






Ensayo


“Los chicos y los grandes, la subjetividad en juego”











Profesora: Ps. María Crisalle
Alumna: E. Mercedes Leyes






Año 2012






Introducción

Cuando en las escuelas se habla de “problemas de aprendizaje”, del “bajo nivel de rendimiento escolar”, de la “disminución de la calidad educativa”, se hablade niños con retraso en el proceso de lecto-escritura, adolescentes que no saben interpretar un texto simple, alumnos que repiten el grado o el año más de una vez y hasta de la violencia y/o la pobreza de los chicos que asisten a la escuela.
Estas problemáticas son detectadas observando, diagnosticando, criticando, evaluando niños o jóvenes que concurren a la escuela y que tienen dificultadespara lograr los aprendizajes curriculares pertinentes y/o llevar adelante la conducta necesaria para participar adecuadamente de la dinámica escolar.
Me propongo en este ensayo entrar al aula y girar la cabeza alternativamente para ambos lados del salón, para el frente donde generalmente encontramos al docente y para los pupitres y sus ocupantes: los alumnos, una y otra vez, tratando de encontrarexplicaciones, preguntas y respuestas que tengan que ver con esa dinámica que se establece entre cada alumno y su docente, entre los alumnos y los docentes, contando para esto con algunas experiencias y con el acompañamiento de producciones teóricas que me permitan incorporar las perspectivas de la prevención, la producción de subjetividad, las múltiples dimensiones diagnósticas y las estrategiasde intervenciones, de la manera que propone Cecilia Ausburger en “Reflexiones sobre una práctica profesional, conceptos para pensar la promoción de la salud”, como trabajadora de la salud y aunque este campo de acción sea el de la educación, buscando abordarlo desde la especificidad de nuestro objeto de trabajo que es la salud y más puntualmente, la psiquis.



Relato de una experiencia: loshechos y las sensaciones

Este es el relato de los hechos y las sensaciones provenientes de la experiencia de una de entre las 15 jornadas transcurridas en el turno mañana de una escuela media del centro de la ciudad de Rosario durante el mes de septiembre de 2012, en las que todos los días fueron similares:

• 7,25 hs. algunos chicos de cada curso ya entraron al salón
• 7,30 hs. suenael timbre de entrada, los alumnos que están en la vereda lentamente van entrando en grupos a los salones,
• 7,40 hs. todavía no hay ningún profesor en los salones, comienzan a llegar y a ingresar cada uno al salón que le corresponde.
• 8,05 hs ingresa el último profesor al aula que le corresponde.

Los alumnos que ingresaron en el horario correspondiente, o hasta varios minutos tarde (conmedia falta en el registro), mientras esperan que llegue el/la profe:

- algunos charlan entre ellos,
- otros duermen sobre el banco,
- otros quedan en silencio y quietos en situación de resignación,
- algunos protestan o preguntan si vendrá la profe o es hora libre.

Desde un aula al que sí llego el profesor se escucha un grito suyo: -“ Estén quietos y callados! ¿Cómo se los tengo quedecir?”-

• 9,20 hs Suena el timbre para el primer recreo.

-¡Recreo, por fin!, se escucha a los profesores, que salen rápidamente del aula, con caras de agotados y sufrimiento.
-¡Recreo, por fin!, dicen los alumnos saliendo rápidamente de los salones, gritando, cantando, empujándose, riéndose.
-¡Uy, no, el recreo! dicen los preceptores y el portero porque ahora ellos tienen que “vigilar”, “vosvigilá ese pasillo y yo los vigilo por este”.

Mientras tanto en la sala de profesores, los mismos comparten un momento en espera de ingresar nuevamente al aula, y se escuchan quejas, lamentaciones:

- “a estos chicos no les importa nada, es muy difícil hacer algo con ellos”,
- “ si, no prestan atención, no traen los materiales, no se la familia cómo no se da cuenta”,
- “a la familia...