Los ejércitos

Entre fuegos cruzados: El caos y la desolación de la violencia.

“— Cuidado, profesor- No sabemos aún en manos de quién quedó el pueblo.
—Seas quienes sean, las mismas manos.”
(Evelio Rosero, Los ejércitos, Barcelona, Tusquest, 2007, pg. 110)

Los ejércitos.
Evelio Rosero.
Novelafenoménica.
Tusquest.
203 páginas.
2007.


La novela “Los ejércitos” narra la historia de Ismael y su esposa Otilia, dos profesores jubilados que han vivido durante cuarenta años en el mismo pueblo: San José, Colombia. Inicialmente, se nos presenta un panorama pacifico, donde el protagonista Ismael describe un ambiente tranquilo en el que cantan las guacamayas y élcumplía su labor recogiendo los naranjos en su casa, con su esposa detrás de él, sus tres gatos y sus peces. A continuación, se introducen los personajes de “El Brasilero” y Geraldina, la pareja vecina. Geraldina es una mujer esbelta y hermosa, que despierta el libido del profesor, quién es un personaje totalmente voyerista; y ella al pasearse desnuda a tomar el sol termina siendo el objeto del deseosexual de Ismael en la mayoría de situaciones contenidas en la historia.

Luego de una breve conversación entre el Brasilero, su esposa y el profesor, sin ninguna connotación violenta (contrario a lo que se esperaría) donde Geraldina se pasea desnuda sin vergüenza ante el profesor, y su esposo no le recrimina, aunque este sabe que él la mira como dice claramente: “—Está usted encaramado en esemuro todos los días, profesor, ¿No se aburre? —No. Recojo mis naranjas. —Y algo más. Mira a mi mujer” (Evelio Rosero, Los ejércitos, pg.15) Más adelante, podemos ver como la esposa del protagonista lo reprende por su actitud, llegando incluso a recomendarle que visite al padre, ya que a ella, él ya no le importa.

Siguiendo con la trama, el primer momento focalizado al tema principal de la novela:La violencia, es un recuerdo del protagonista sobre el día en que había conocido a su esposa. Nos cuenta el asesinato de un hombre en alguna plaza a manos de un niño, de once o doce años. Ismael nos describe el temor, la sensación de sobrecogimiento y nauseas que le causan el descubrir que fuera un niño, con aquella mirada de alguien muerto en vida, hecho de piedra.

De aquí, se continúa contandoanécdotas de la violencia en el pueblo, de cómo los conflictos armados han dejado su huella en la historia de este. Desde secuestros hasta cómo llenaron a la iglesia de dinamita y la hicieron estallar. Especialmente, en el aniversario del secuestro de Marco Saldarriaga, todos se reúnen en la casa de su esposa Hortensia Galindo para brindarle apoyo. Pero por un dolor en la rodilla, Ismael decidedejar ir a su esposa sola a la reunión y él visitar al curandero del pueblo, que vivía subiendo por la montaña vecina. En su camino, podemos ver la paranoia que genera caminar a esas horas de la noche por el lugar, el miedo a encontrarse de frente con un peligro inminente.
“¿A qué seguir tendido? Amanece y salgo de la casa: vuelvo otra vez sobre mis pasos, hasta el acantilado. En la montaña deenfrente, a esta hora del amanecer, se ven como imperecederas las viviendas diseminadas, lejos una de otras, pero unidas en todo caso porque están y estarán siempre en la misma montaña, alta y azul. Hace años, antes de Otilia, me imaginaba viviendo en una de ellas el resto de mi vida. Nadie las habita, hoy, o son muy pocas las habitadas; no hace más de dos años había cerca de noventa familias, y con lapresencia de la guerra —el narcotráfico y ejército, guerrilla y paramilitares— solo permanecen unas dieciséis. Muchos murieron, los más debieron marcharse por fuerza: de aquí en adelante quién sabe cuántas familias irán a quedar, ¿quedaremos nosotros?, aparto mis ojos del paisaje porque por primera vez no lo soporto, ha cambiado todo, hoy —pero no como se debe, digo yo, maldita sea.”
(Los...