Los siete potajes

Devoción por los siete potajes de Catacaos
Un promedio de 3000 participantes han asistido a la cita gastronómica

Jueves, 28 de marzo, nueve de la mañana. El día comienza frío, nublado, anunciando un invierno a la vuelta de la esquina. Las calles de las afueras de la ciudad no denotan nada especial, quizá porque aún es temprano. Parece un día normal, un día cualquiera en Catacaos. Pero soloparece.
La Plaza de Armas no ha recibido la mañana como siempre: más personas la cruzan, un nutrido grupo de efectivos de Policía Nacional y Serenazgo (COMPROBAR SI SE ESCRIBE CON MAYÚSCULAS) se concentra allí. Se percibe entre las calles polvorientas del centro el movimiento propio de los días de la fiesta.
Muchos recién despiertan y se ponen en movimiento para afrontar este Jueves Santo. UnJueves Santo en Catacaos, Piura. Sin embargo, para muchos vecinos cataquenses este Jueves Santo comenzó hace ya varias horas… a la una de la mañana. Y es que, aunque no lo pareciera temprano en la mañana, el Jueves Santo no es una jornada irrelevante en Catacaos y eso se puede percibirse en su centro urbano.
El Jirón San Francisco 864 no duerme la noche de este jueves. Desde hace dos semanas, lacasa del señor Walter Cortés Medina, Depositario, de la festividad de los ‘Siete Potajes’ (¿mayúscula?) se prepara para el evento y los vecinos de su calle trabajan voluntariamente con él.
La festividad de los siete potajes se celebra con dos banquetes que tienen lugar el Jueves y Viernes Santo. Se trata de emular la última cena del Señor con sus Apóstoles y tiene como objetivo la reunión de losciudadanos de Catacaos, el compartir los alimentos y disfrutar de unas horas de convivencia sin importar clase social o la procedencia.
Los banquetes corren a cargo de las figuras del Depositario y el Doliente, cargos que se asignan a un miembro distinto cada año entre los integrantes de las cofradías cataquenses. Estos grandes almuerzos se sirven al aire libre, bajo grandes carpas decoradas quese instalan en la calle del Depositario, el Jueves Santo, y del Doliente, el Viernes Santo. Tanto Depositario como Doliente corren a cargo de los gastos de los platos y, ambos, cuentan con la ayuda de sus vecinos a la hora de la preparación del evento, especialmente en cuanto a la preparación de los platillos, en el momento de servirlos y cuando toca recoger.
Los actos oficiales de los sieteportajes de la Semana Santa de Catacaos comienzan el Jueves Santo con la misa solemne en la iglesia de la ciudad. A continuación, una conferencia con el párroco y las autoridades recuerda la importancia de la celebración y los detalles más trascendentales de esta fiesta cuyo origen se remonta a la colonización española.


La tradición impone el menú
En el mediodía del Jueves Santo se sirven losiete potajes de la carne y en el patio de la casa del señor Walter Cortés Medina se concentran un promedio de 25 vecinas del Jirón San Francisco, que han comenzado a la una de la mañana con la preparación del almuerzo en una cocina improvisada en el mismo patio del hogar. Cada una aporta su tiempo, su devoción y varios de sus utensilios de cocina a la causa del señor procurador.
La señora GloriaCruz es una de estas vecinas cataquenses que hoy se ha levantado antes del amanecer para apoyar a su Procurador. Vive en el Jirón San Francisco 864 desde que nació, hace 56 años, y colabora con la festividad de ‘Los Siete Potajes’ en todas sus etapas, de inicio a fin, costumbre que ha trasmitido a sus hijos y nietos. Hace tres años, la Doliente de aquel entonces, su amiga Angelita Viera, le pidióque colaborara y ella accedió. Desde entonces no ha faltado a la cita.
Entre fogones, la señora Cruz junto con el resto de las mujeres pelan vegetales, cuecen arroz, cortan pollo, fríen pavo… el trajín es constante y la meta consiste en alimentar a cerca de tres mil personas de diversa procedencia en un día. En el patio de la residencia del señor Procurador se respira un ambiente de trabajo y...