Martín Lutero y Juan Gutember
Según que se comparta o no su doctrina, Lutero es un apóstol o como mínimo un profeta para unos, y para otros un hereje renegado. Destructor de un sinfín de cosas, este hombre deintensas y enérgicas convicciones representa, con su concepción del hombre como individuo aislado de Dios, de la historia y del mundo, uno de los pilares sobre los que se apoya la Edad Moderna. Iniciadorde la Reforma (período de dos siglos de la historia del cristianismo de amplia repercusión europea, origen de las Iglesias protestantes y de la Contrarreforma), rechazó la autoridad del papa y debilitóel poder de la Iglesia. La abolición del purgatorio, de donde las almas eran liberadas con misas, el rechazo de la doctrina de las indulgencias, que mermaría de manera considerable los ingresos delpapa, y, sobre todo, la doctrina de la predestinación, que independiza el alma de la acción de los clérigos después de la muerte (a lo que hay que añadir el reconocimiento de todo príncipe protestantecomo jefe de la Iglesia de su país), obligan presentar la Reforma como una gran revolución de las naciones menos civilizadas contra el dominio intelectual de Roma.JUAN GUTEMBER
(Johannes Gensfleich Gutenberg; Maguncia, Alemania, h. 1399-1468) Inventor de la imprenta. A mediados del siglo XV perfeccionó el procedimiento de fabricaciónde libros en serie, mejorando un conjunto de elementos que, en sí mismos, ya estaban inventados, la mayor parte de ellos por los chinos (tinta de impresión, tipos móviles, aleación metálica adecuadapara fundirlos…).
Aunque ninguna de sus innovaciones fue un descubrimiento completamente nuevo, sí difundió en Europa la imprenta de tipos móviles -mucho más eficaz que el anterior procedimiento demoldes compactos grabados para cada página- de manera independiente a los chinos, quienes, por otra parte, apenas hicieron uso de dicho invento desde su aparición en el siglo XI.
De la imprenta de...
Regístrate para leer el documento completo.