MECANISMOS DE INTERVENCIÓN DEL SECTOR PÚBLICO
SECTOR PÚBLICO. LAS EMPRESAS
PÚBLICAS
Luis Ángel Hierro Recio
José Miguel Herrera Maldonado
Departamento de Economía e Historia Económica
Universidad de Sevilla
1. Tipos de intervención pública
2. Concepto de empresa pública
¿Por qué crear una empresa pública?
El sector empresarial de la Junta de Andalucía 3. Objetivos económicos de las empresas públicas
Conflictos entre objetivos
El control de la empresa pública
4. Fuentes de financiación de las empresas públicas. Sistemas de fijación
de precios. La rentabilidad de la empresa pública.
5. Privatización de empresas públicas
Argumentos a favor de la privatización
Críticas a los argumentos utilizados para la privatización
6. Bibliografía
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1.
Tipos de intervención pública
La Economía del Bienestar, con apoyo fundamental en la teoría de los fallos del
mercado, abre la puerta de manera objetiva a la intervención pública para corregir las
situaciones en las que el mercado no produce eficientemente, ya sea por no funcionar en
competencia perfecta, por generar distribuciones percibidas socialmente como poco equitativas o por producir en niveles inferiores al pleno empleo. Esta intervención del sector
público, ya universalmente aceptada (mucho más en momentos de crisis de los sistemas
económicos de libre mercado), se concreta en un abanico muy amplio de actuaciones, que se
pueden agrupar en cuatro tipos de intervención: regulación, producción pública, provisión
pública y actividades de financiación.
La regulación se ocupa desde definir el marco jurídico que garantiza y protege los
derechos de propiedad y el intercambio (estructura legal básica de nuestro sistema
socioeconómico) a la definición pormenorizada de cada uno de los procedimientos o
relaciones que se siguen o se establecen en el mundo en que vivimos: leyes de contratos,
jornada laboral, salario mínimo, leyes sobre la competencia, normas de calidad, garantías
financieras, publicidad, títulos académicos oficiales y requerimiento de los mismos para la
realización de determinadas prácticas, todo tipo de regulaciones sectoriales, etc.
Evidentemente, el uso de este instrumento regulador requiere de determinadas
instituciones que permitan su efectividad: un sistema político que cree las normas, unos
sistemas judicial y policial que permitan y obliguen su cumplimiento, un sistema de protección
general frente a ingerencias extranjeras, etc. Este grupo de actuaciones constituyen las más
elementales actividades de producción pública, el segundo tipo de intervención del que hemos
hablado. La producción pública de bienes y servicios, que implica una intervención directa
sobre la oferta de los bienes suministrados, puede adoptar distintas formas: producciones no
comercializables (los servicios generales citados más arriba), producciones comercializables
(educación, sanidad, transportes, etc.), servicios financieros (prestados a determinadas
actividades como la vivienda, sectores en crisis, sectores innovadores, etc.) y servicios de
aseguramiento (fondo de garantía de depósitos, fondo de garantía salarial, prestaciones por
desempleo, etc.).
Puede ocurrir que el sector público asuma la obligación de proveer los bienes y
servicios, pero que renuncie a su producción. Ese es el caso de la tercera fórmula de
intervención, en la cual el sector público asume la obligación financiera pero la acción de
producción (económicamente entendida) es realizada por una institución privada, de ahí que
se hable de provisión pública y no de producción pública. Por ejemplo este es el caso de la
enseñanza concertada en España o la atención bucodental a menores en Andalucía. ...
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