Miseria y progreso

Explicable revuelo en medios académicos y airadas reacciones de los especialistas ha generado la iniciativa parlamentaria, liderada por la representante Martha Catalina Daniels, encaminada a establecer ciertas condiciones que permitan a los parlamentarios obtener el título de politólogo o de especialista en relaciones internacionales por el hecho de haber ejercido su función durante dos añosconsecutivos y de manera ininterrumpida.
Lo que requerirían en tal empeño, según la iniciativa, sería presentar un examen de conocimientos en la materia y aprobar un proyecto de grado. En defensa de tal propuesta su autora ha dicho que tiene como propósito reconocer la perseverancia y la dedicación que muchos congresistas le ponen a su trabajo.
Sobre el particular vale la pena tener presente que hoyla carrera de Ciencia Política se puede estudiar en distintos centros académicos de gran prestigio, y quienes optan al grado de politólogo, en la mayoría de los casos lo hacen después de haber adelantado rigurosos estudios de alta exigencia. Así, a la carrera de Ciencia Política se aplican, en términos generales, los mismos requisitos que se demandan en otras áreas de estudio.
Queda claro conesto que la Ciencia Política no se puede catalogar como una carrera de rango subalterno que demande requisitos particularmente benévolos. Es por esa causa por lo que tampoco parece sensato aliviar sus requerimientos frente a un grupo especial de ciudadanos por más respetable que éste sea, ni pretender que el Congreso se convierta en universidad.
Por otra parte, y a manera de reflexión, bien valdríala pena preguntarse a propósito de este episodio cuánto se ha investigado acerca de la demanda por politólogos en el país en estos momentos. Hay muchos graduados o muy pocos? A qué se dedican? Están siendo bien o mal aprovechados por la sociedad? Adquieren en las universidades las destrezas que su entorno demanda en estos momentos, o no? En fin, que esta iniciativa se convierta en pretextocreativo para debatir sobre la formación de quienes supuestamente deben ayudarnos a entender a los demás mortales los intrincados caminos de la política, y las relaciones de poder.
%% \ Miseria y progreso: El doctor Hernán Echavarría Olózaga acaba de publicar un libro polémico titulado Miseria y progreso, en el cual describe un crudo panorama de la situación por la que atraviesa Colombia. Lapublicación, editada por 3R Editores, es una vibrante reflexión de un hombre que se ha hecho a pulso, y que mira con angustia e inteligencia los problemas nacionales que tienen sus orígenes desde la Independencia. Echavarría escribe sobre temas como la revolución industrial en Colombia, el marxismo, las estructuras del neoliberalismo, y al final plantea soluciones.
El ex ministro Rudolf Hommes, quien hacela presentación del libro, afirma que Echavarría piensa que la situación colombiana no es sostenible porque la miseria no puede convivir indefinidamente al lado de la opulencia sin causar graves tensiones políticas y sociales que lleven inexorablemente al derrumbamiento del sistema de organización de la sociedad existente . Al leer el libro solo queda un camino, sin puntos intermedios: el progreso,para salir del atraso y no caer en un abismo irreversible
¿qué podría hacer yo en lugar del que gobierna?”.
Lo malo de la fracasomanía es que es contagiosa, pues es intelectualmente facilista: como toda ideología, muchas veces evita tener que pensar. No se trata de caer en la posición contraria, que asumen, por ejemplo, muchos funcionarios públicos o aspirantes a nuevos cargos en el sector, queson capaces, o por lo menos lo intentan, de maquillar cualquier fracaso real. Se trata, más bien, de valorar lo nuestro, lo que hemos logrado, lo que podemos hacer, mantener pues, un sesgo por la esperanza.

DE ACUERDO CON:
Economía keynesiana, o Keynesianismo, teoría económica basada en las ideas de John Maynard Keynes, tal y como plasmó en su libro Teoría general sobre el empleo el...