Miss

De sexo y de piel
Pleno año 2012 y la gente sigue comportándose como si las diferencias fueran un mal augurio sobre sus personas, como si entrar en contacto con algo diferente fuera a contagiarlosde algún mal incurable, o como si fueran a convertirse en otra persona por el simple hecho der un poco tolerantes. De verdad que cada vez entiendo menos al mundo.
Podemos hablar de hace un par dedécadas, cuando la revolución sexual estalló y las parejas homosexuales eran cada vez más vistas por las calles, sin miedo, sabiendo que entonces tenían más libertad para amar sin sentir que estabanenfermos o que estaban fallándole a alguien. Personas que eran amadas y no se sentían mal consigo mismas eran forzadas a recibir terapias dolorosas que no tenían efecto alguno, pero deberían haberlo tenido¿Verdad? Porque la homosexualidad era una enfermedad, un trastorno psicológico que podía erradicarse, que debía quedarse en el olvido pues estaba llevando a la sociedad a la perdición y por el caminodel mal.
Y ahí estaban las amas de casa y los padres conservadores, citando a la biblia cada dos por tres, enviando a sus hijos a manicomios para que los “arreglaran”. Ni como entender a la gente,hablando de cuestiones mentales y de religión a la vez.
No se si me puede más el enojo o la tristeza cuando la gente busca legitimar su odio por medio de premisas religiosas, y también raro, porquea mí me dijeron que Dios amaba a todos sus hijos e hijas. En lo que a mí concierne, también dijo “amaos los unos a los otros”. Que no tenga nada de raro que ahora, yo ame a una mujer y Elton Johntenga la vida soñada por amar a un hombre y tener una familia con él.
Que conste que yo solamente hago lo que Dios me dice que haga.
Ya ni qué decir cuando vinieron con el termino de homofobia parahablar de las personas que discriminaban a otras por sus preferencias sexuales. ¿Homofobia? ¡Por favor! Como diría un usuario de twitter al que sigo cuando me acuerdo, “no es una fobia, no estás...