Municipio, Democracia Y Garantías Constitucionales

EL REGIMEN MUNICIPAL

I. Introducción

Algunas del conjunto de premisas que sustentan el cuerpo legal de nuestro país, que operan con la impronta axiomática de la moral histórica occidental, presentes en nuestra Constitución Nacional y en la matriz de nuestra cultura actual, sufren la vulneración y manipuleo técnico, disfrazadas de ventaja, pero sólo para quien ejerza discrecionalmente sustareas ejecutivas dentro de una esfera del poder funcional del estado: el Municipio. Las siguientes líneas intentarán arrojar luz acerca de la situación democrática en el régimen municipal, la habilitación legal a la concentración del poder unipersonal por turnos, y la exclusión del empleado administrativo municipal del goce de los derechos que más de un siglo de luchas sociales consiguieron justa ydignamente a nombre de los trabajadores.

II. Una cuestión legal

Como reflejo de los escalones superiores de la administración pública, el ejecutivo municipal conserva la misma –o tal vez mayor- imagen hipertrofiada, e inyectadas las facultades superlativas en su trono de inten (presi) dente, que dispondrán quienes ocupasen tal lugar. Este orden conceptual posiblemente sea la herencia dequienes fueran los arquitectos de los alcances de las funciones del poder público, que pensaban al poder

centrípeto como la solución a un momento histórico en que se creía, era necesario concentrar el poder en manos de un hombre a fin de consolidar la paz y el orden. Es una cuestión legal, pero incorporada en nuestra cultura, en nuestras vistas y mentes educadas para responder a la figura única eirreemplazable del jefe del ejecutivo: “el presidente es considerado como la encarnación del país, principal custodio e intérprete de sus intereses”1; prácticas de dudosa licitud que se tornan costumbre, normalizan y amoldan sus ciudadanos en el seno del cuerpo legal que habilita al intendente poder absoluto en su municipio. La Ley Orgánica de las Municipalidades –decreto 6769/58- formalmentedesigna al intendente como quien desempeña sus labores administrativas en el Departamento Ejecutivo, y a los que tuvieran título de concejales, que se empeñarían en labores legislativas dentro del Departamento Deliberativo. El total de secretarías es dispuesto por el ejecutivo y en reducidos casos en conjunto con el deliberativo. Están conformadas por distintas direcciones que tienen como consignaobligatoria operar en consonancia a los mandatos del ejecutivo, actuando bajo la órbita de las ordenanzas sancionadas por el concejo deliberante; la misma ley (decreto 6769/58 LEY ORGANICA DE LAS MUNICIPALIDADES), tipifica a este cuerpo como auxiliares del Intendente: funcionarios, que son seleccionados por él. Tal como lo establece el artículo 107 del decreto en mención, al poder ejecutivo no sólole corresponde la administración general del municipio, sino que también está dotado de capacidad para vetar disposiciones del concejo deliberante (art. 108). El Intendente (Art 108 inc.7. Texto según ley 11.024), podrá formar parte en los debates, aunque sin la capacidad de votar; esto claramente constituye una influencia en el desarrollo y fin de la discusión, siendo que jugarían las herramientaspersuasivas del intendente a favor del interés por el que se interesase.

Los límites inexistentes al poder del ejecutivo municipal son perfectamente lícitos en sentido normativo y perfectamente normales, en tanto a la cultura política que se ha creado a partir de ello. En lo que sigue del análisis, se intentará mostrar cómo se constituyen prácticas cotidianas contradictorias a derechosgarantizados por nuestra constitución, que a su vez son prácticas “lícitas” y “normales”.

III. Contradicciones 2

Si bien artículo 4 de la Ley 11.757 (ESTATUTO PARA EL PERSONAL DE LAS MUNICIPALIDADES) establece reglas democráticas para el ingreso a la función pública municipal (por concurso), no existe una mecánica seria que aplique esa directiva. El artículo 11, por otra parte, enumera los casos...