muzica
Sobre Mili Balákirev:
La música de Balakirev poco cuenta ya en la actualidad. Sehan olvidado sus dos sinfonías clásicas. Su fantasía para piano, Islamej, terminó cansando a los virtuosos de campanillas, que la espaciaban cada vez más en sus recitales. Bajo su brillo lisztiano, enefecto, retumba a menudo la vacuidad. El poema sinfónico Tamara -su primera audición fue en 1882- tiene una iluminación bastante personal, pero es árido y deshilvanado, lo cual no nos extraña tras suinterminable gestación. Cfr. Lucien Rebatet, Una historia de la música, Omega, 2007, p. 581.
Sobre Charles Gounod:
Colmado de todos los honores, considerado durante treinta años el más eximiocompositor francés, fue con mucho el más inteligente y el más animoso de los académicos, defendiendo enérgicamente las mejores causas, pero también las más difíciles, la de Wagner [...] Se ha queridopersonificar en Gounod el "renacimiento francés". Es mucho decir. Se ha rehabilitado su nombre; pero es bien poca la música que cabe citar como refuerzo [...] Después de transcurrido casi un siglo, el bagajepóstumo de Gounod es ínfimo. Nos hallamos lejos del "trono de oro sobre el cual recibirá las loas de las generaciones futuras" que le profetizaba Saint-Saëns. Cfr. Lucien Rebatet, Una historia de lamúsica, Omega, 2007, pp. 530-532.
Sobre Giacomo Meyerbeer:
Meyerbeer se ha hundido desde hace medio siglo en un tal abismo que no es ya cuestión de atacarlo. Nos diverte más rebuscar en los discos...
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