POEMA

TULIPANES
María… ¿Qué vas a hacer con estos 87 años de vida? Ya no te sientes útil ya vas para 6 años siendo inquilina de este asilo de mala muerte, al que tus hijos te mandaron. Con la promesa de que en cuanto encontraran una casa con una habitación acogedora para ti te sacarían de esta porquería de lugar, al que solo serías huésped en el verano de 2008. Te has perdido de variosacontecimientos ya, el nacimiento de tu bisnieto en el que estuviste apoyando, cuidando y dándole consejos a la esposa de tu nieto durante la gestación. Y todo eso para que no te mandaran ni una foto del bebé y lo conocieras. Esos jóvenes tan ingratos.
Pero mírate María, ya con ese cansancio ¿Qué te vas a querer acordar de lo malo de la vida? Siempre te vemos tan alegre. Como si lo malo nunca hubieracorrompido tu sonrisa. No demostrabas debilidad ni en la muerte de Pedro, el señor que llego hace 4 años y murió 8 meses después de su trágica llegada, viendo su programa favorito. Sí ese de las guerras y armas que a nadie le gustaba porque terminábamos durmiendo y eso que Carla, la nueva enfermera mandada del hospital de San Ignacio aún no nos daba pastillas tranquilizantes.
Ahora, a esos 6 años quete conozco es la primera vez que te veo llorar, no imagino qué logró que una mujer de carácter tan fuerte se quebrara cual hoja seca.
Solo saliste por la puerta que producía un sonido tan molesto cuando la abríamos; porque ya llevábamos meses diciéndole al Señor Reséndiz el dueño del asilo que la arreglara. Nunca nos hace caso ese señorito. Solo repite lo mismo cada que nos ve… “Pero ya para quesi ustedes están más cerca de allá que de acá”.
Era tu cumpleaños el reloj marcaba que eran las 3:11 pm del 4 de Noviembre; saliste llorando. Le pregunte a Carmen que pasaba. Estaba dormida. Sí, lo sé. Somos ya unos vejestorios. Dormimos, despertamos, comemos, vamos al baño. Por si fuera poco todo esto es controlado. Tienen nuestro tiempo bien calculado. Hay noches en las que me despierto con laidea de que todo solo es un sueño. Creo estar en mi cama con mi esposo. Que en gloria esté. Y nada solo estamos apilados como en un orfanato. Solo separados por pedazos de cortinas. Si así se le puede llamar. Mira ya hasta me salí del tema María.
Estabas sentada en la silla del jardín junto a los tulipanes que te mandaron por correspondencia ese día, tenías una mirada que nunca había logrado veren ti. Desbordada de nostalgia. De amor.
Antes de que me sentara junto a ti, dijiste que tenías algo bien guardado, por años. Algo que estaba matándote por dentro. Que por muchos años estuvo arraigado en tu garganta y que no te creías con la fuerza para poder confesarlo a alguien. Que te sentías agobiada por el estilo de vida que llevabas. Que estabas harta de hacer bulto en esa casa de muertosvivientes, porque ya no te catalogabas viva sino muerta. Tanto para tu familia como para el amor de tu vida. Aquel ser que dejó de escribir un año antes sin razón alguna. Que ya no querías seguir viviendo y que hace 6 años perdiste la noción de vivir. En cuanto pusiste tu menudo cuerpo en este asilo de quinta, sabias que no saldrías de ahí en mucho tiempo y si salías, ya ibas a ser sólo un cadávermás para la funeraria, tu no lo sabias pero la recepcionista te secreteó que ya hasta habían firmado un acuerdo tus hijos que a su vez ni leyeron, nada más la inscripción de acepto en esa hoja añeja. Tan solo en cuanto murieras la funeraria que para una gran mercadotecnia bien aplicada la ubicaron al frente del asilo. Mi gran oferta era que habría un 30 % de descuento y un 10% extra por haberrealizado una estancia en el asilo de LA ESPERANZA. Yo lo tomaba como un portal. Mi día de partir se acerca más o yo me acerco a él.
Me sorprendiste con las cosas que dijiste en tan poco tiempo. Nunca me había preocupado tanto por ti. Nunca lo creí relevante. Ahora me arrepiento; tantos problemas que ahogan a una persona, y a la que no se le nota la tristeza en los ojos. Ahora veo tu siempre has...