Poema

Era un día soleado de verano. El sol brillaba en todo su esplendor, por el sendero q. conducía al campo donde pensábamos pasar un hermoso día familiar, todo era hermoso, los arboles verdes, elcielo azul con sus nubes blancas de algodón, una suave brisa que acariciaba todo a su paso. De repente algo nos detuvo en el camino, un hermoso bizcocho blanco de bodas a horillas de la carretera llamonuestra atención. Detuvimos el auto y bajamos a verificar de qué se trataba. Pudimos observar todo a nuestro alrededor al parecer no habían personas cerca del lugar todo estaba muy tranquilo ycallado, en aquel sendero solo estábamos mi familia y yo. Para nuestro asombro y luego de haber mirado todos los lugares cercanos nos damos cuenta que más adelante a penas unos cuantos pies dedistancias hay una caja color oro brillante, al acercarnos la tome en mis manos y para mi sorpresa me percato que esa caja contenía unos preciosos anillos de matrimonio.
Estábamos muy asombrados detodo esto que estaba ocurriendo, el bizcocho no parecía haberse caído de algún auto dado que se encontraba intacto y en buenas condiciones y para completar aquellos anillos relucientes y hermosos, todosnos preguntábamos que había ocurrido, a que se debía que estas cosas se encontraran en este sendero y porque las habían dejado allí.
De pronto un par de novios vienen corriendo por el sendero.Ella, con su impecable traje blanco y el con su etiqueta se veían felices, muy contentos del paso a dar. Al mirar nuevamente al otro lado del sendero para mi sorpresa una mesa finamente preparadaesperando que el bizcocho llegara a ella, y gente esperando la llegada de los felices novios. Corrí rápidamente al encuentro de la pareja para entregarle los anillos y decirles donde estaba elbizcocho.
Una vez todo en orden comenzó la ceremonia y mi familia y yo fuimos invitados, al momento de cortar el bizcocho la novia fue hasta la mesa donde estaba mi familia a darnos del sabroso...