Privados de libertad, acciones pastorales

Privados de Libertad, Acciones Pastorales.
Hna. Cristina Azabal

(Veremos parte del video del Papa Juan XXIII, su visita a la Prisión Regina Coeli, el 23 de Diciembre de 1958, desde: 1:44:41 hasta 1:49:10)


El Papa Juan… Juan “el Bueno”… y su mensaje…
Un mensaje que, de tan profundo, es tan simple, casi como Dios o como los hombres que están muy cerca de Dios.
Un lenguaje que, parallegar al otro, se hace gesto, mirada, caricia, humor, ternura y emoción…
Cada semana los agentes de Pastoral Penitenciaria llevamos el Evangelio a la cárcel. Y habría tantas páginas para comentar acá… pero es poco el tiempo y tengo que elegir una…
Supuse que los textos paradigmáticos para la Orden serían leídos y contemplados con mucha más capacidad y elocuencia que la mía… y así fue.
Por esoelegí uno que no usamos habitualmente pero que, creo, refleja nuestra tarea en la cárcel y que he compartido antes de venir, con quienes están privadas de su libertad en la Brigada Femenina de San Miguel de Tucumán.
Es el de la mujer que pierde una pequeña moneda y barre toda la casa para encontrarla y, al hallarla, convoca a todas sus vecinas para celebrar.
La tarea del Agente de PastoralPenitenciaria es muy sencilla y no hace falta saber mucho…: lo suficiente como para… barrer… y ayudar a barrer.
Sí, somos quienes ayudamos a los hermanos y hermanas privados de su libertad a barrer la casa…, a ir convirtiendo el tiempo “impuesto” en prisión en un tiempo “favorable” para su liberación… desde adentro.
Como Luis, que estando preso en Misiones me escribía: “Yo era el menor de mi familia…¡éramos tan felices!... hasta que murieron papá y mamá en muy poco tiempo. Mis hermanos tuvieron que ocuparse de salir a trabajar y yo…, que era un buen niño de la Acción Católica empecé a sentir tanta rabia adentro…., hice muy malas amistades… ¡una banda!... y como era chiquito me aprovechaban para entrar por las claraboyas a robar hasta que, después de tantas excarcelaciones… aquí estoy.
En laslargas noches del penal he proyectado la película de mi vida en el techo de mi celda… y he visto que Dios nunca dejó de buscarme… ¡y al fin me encontró aquí!.
Ahora, ya sé lo que quiero hacer de mi vida: con mi novia pondremos un comedor para niños de la calle y un tallercito… aprendí carpintería en la cárcel y quiero darles un oficio. Tengo que devolverle a la sociedad el tiempo que perdí alláafuera.”
No puedo darles más detalles porque el tiempo es tirano, pero les aseguro que su comedor y su taller devuelven la vida a muchos niños.
“Manos a la obra”… es una expresión que repetimos a menudo. Hay que prepararse para salir, para volver a casa, para construir un mañana mejor.
En la cárcel reina la depresión… El cansancio de….nada, que es el peor de los cansancios.
Y nosotros somos losencargados de llenar de entusiasmo las horas vacías…
Entusiasmo, hermosa palabra que etimológicamente significa “llevar a Dios adentro”.
¿Somos los encargados de llevarles a Dios?... en realidad, Jesús está allí… lo dijo Él… “estuve preso y me visitaste”…
Somos los encargados de que lo descubran, de que descubran Su Presencia en medio de ellos…, dentro de ellos.
La cárcel es el desierto deOseas… donde Dios espera al privado de su libertad para hablarle al corazón, para confiarle Sus planes… para hacerle volver…
¿De dónde?... de esos caminos que tomó erróneamente y que lo alejaron de la casa paterna….
Caminos que todos tomamos alguna vez… pero que no necesariamente nos llevaron a la cárcel.
Yo llamaría a la Pastoral Penitenciaria, Pastoral del Reencuentro…
Reencuentro con él o conella misma… con aquel niño que fue alguna vez…, antes que se enturbiara su alma… A veces, es bueno ayudar a reencontrarse con los “sueños de cuna” y si no hubo nadie que los tuviera… ¡Dios sí los tuvo y los tiene para con cada uno!... porque “aunque tu madre y tu padre te abandonaran, Yo no te abandonaré, dice el Señor”.
Nunca más volverá a tener tanto tiempo… para barrer.
Para sacar las...