psicologia sexualidad

Taller terapia sexual
I curso de Especialización en psicología clínica del servicio de

atención psicológica.
1. Principios y Técnicas Terapéuticas básicas en terapia
sexual
La intervención terapéutica ha sido organizada o
distribuida según una secuencia de cuatro apartados o niveles
sucesivos en orden creciente de intensidad para ser aplicados
según el grado de dificultad o losrequerimientos del caso. El
primero de estos cuatro apartados es el denominado
condiciones previas terapéuticas y aunque el nombre pueda no
sugerirlo directamente, constituyen de hecho, el primer nivel de
intervención terapéutica en la práctica totalidad de los
problemas sexuales, pudiendo además afirmarse que si no se
asegura el control o la superación de los distintos elementos de
este apartadoprevio, es altamente improbable que pueda
avanzarse y llevar a buen término la terapia de cualquier
problema sexual que podemos haber planificado.

Condiciones
previas
terapéuticas

1º nivel de
intervención

2º nivel de
intervención

-

3ºnivel de
intervención

-

Reetiquetado
Explicación adecuada sobre el problema
Responsabilidad sobre el problema y solución
Estilos de vidaconstructivos
Información y educación sexual
Cambio de actitudes negativas
Mejorar la comunicación y relación entre la pareja a
nivel personal y a nivel sexual
Reducir y eliminar la ansiedad ante la relación sexual
Terapia sexual: indicaciones o técnicas especificas
según el problema
Terapia intensiva psico-sexual: problemas de
identidad, orientación, roles, intimidad, rivalidad, etc.Tratamiento de otros problemas psicológicos u
orgánicos asociados

El primero de estos elementos es Reetiquetado del problema y
consiste básicamente en el cambio de nombre o etiqueta que normalmente es
Mª Araceli Ojeda Mora. Psicóloga- Sexóloga, col. Nº AO06573. Colaboradora del
Servicio de Atención Psicológica

preciso sugerir en los pacientes con problemas sexuales. En este sentido,puede afirmarse que estos pacientes sueles utilizar para designar o referirse
a sus problemas etiquetas negativas y normalmente culpabilizadoras, como
puede ser el caso del marido que alude o se queja de que su mujer es una
“frígida” y “más fría que el hielo”, atribuyéndole por completo la culpa de su
mala relación sexual. Ante estos casos, procede enseñar al sujeto a
redenominar (reetiquetar)estos fenómenos o problemas de modo más
apropiado, tratando de ajustarlo a la realidad que describen y eliminando la
gran dosis de culpabilidad que las etiquetas negativas suelen entrañar.
Un segundo elemento dentro de estas condiciones previas, muy
relacionado con el anterior, es el de la explicación mantenida por el sujeto o
la pareja sobre el problema. Respecto de este elemento el objetivoa este
nivel es el de asegurar que el sujeto mantenga una explicación razonable y
adecuada sobre el problema, en lugar de las interpretaciones irracionales y
desmedidas que normalmente suelen sostener en torno al mismo. Estas
interpretaciones pueden ser inadecuadas, por su parte, tanto por su excesiva
simplicidad e irresponsabilidad, como es el caso del recurso fácil e
interpretacionesmédicas u organicistas, en términos de supuestas
alteraciones genéticas, defectos físicos o enfermedades como responsables de
la conducta sexual inadecuada; o por el contrario, la inadecuación de la
explicación puede derivarse del recurso a elementos extraños, misteriosos y
de dudosa validez, propios de teorías más o menos exóticas y de escaso valor
científico, aunque a veces puedan ser sostenidaspor profesionales dedicados
a estos problemas, que por si naturaleza e importancia han sido
tradicionalmente objeto de un considerable número de especulaciones. La
finalidad última en todos estos casos, es la de sustituir estas posibles
explicaciones por una explicación adecuada que dé cuenta tanto de la
génesis, como del mantenimiento del problema, normalmente en términos
funcionales,...