Psicología Clínica

“LO HIJOS DE LA MALINCHE”
MARCELA JAIMES PANTOJA

Este texto nos habla de la naturaleza del mexicano, nuestras actitudes comunes y un sentimiento de inferioridad que nos caracteriza. Tenemos encomún una forma de ser en la que se vislumbran las huellas de nuestro oscuro pasado, el dolor de nuestros ancestros, las injusticias que hemos vivido, las circunstancias en las que nos conformamos comopueblo, robados, asaltados, violados y violentados, ultrajados por nuestros conquistadores quienes después nos impusieron a fuerza de golpes una religión ajena, donde dios está en una cruz y no en lanaturaleza, en el campo, el sol, la lluvia y la tierra.
Las mujeres son la representación de lo bueno y de lo malo, de la vida y la muerte, del origen y la destrucción. Cuando queremos insultarnosusamos ofenzas a la madre, y eso nos hiere profundamente el orgullo y la dignidad.
Los españoles nos amedrentaron y disminuyeron a tal grado que desarrollamos una especie de moral de siervo patológicaque extrañamente adquirimos desde la cuna, no nos atrevemos a ser nosotros mismos ante los demás y nos reservamos esta expresión más que al calor de las copas o en el dolor que causa la muerte.Cuando en público nos comportamos temerosos, pero lo ocultamos con una sonrisa, no nos atrevemos a decir que no por miedo y de manera falsa aceptamos amablemente.
Nos liberamos de esta represión cuandoexpresamos nuestra frustración con un grito, cuando usamos el verbo chingar en sus tan variados matices y significados que van desde lo positivo (ser un chingón) hasta lo negativo (ser chingado) que eslo opuesto, y siempre viene impreso el matiz del romper, quebrar, lastimar, matar, aprovecharse de algo o alguien hasta quitarle lo que lo hace valer. Es así como concebimos la vida social de nuestropaís el chingón y el chingado, el que no tranza no avanza, si no chingas, te chingan. Es por eso que vivimos en esta cultura caótica donde no hay respeto y todos queremos sacar el mayor provecho de...