Reelección Parlamentaria
Páginas: 13 (3189 palabras)
Publicado: 2 de marzo de 2013
LA REELECCIÓN DE LEGISLADORES
Nada ni nadie puedes resistirse al cambio y, ciertamente nuestro país no es en forma alguna la excepción a esta regla. De hecho, bien podría afirmarse que en los últimos tiempos, por diversas circunstancias, este proceso se ha visto acelerado como pocas veces en el pasado. Ello ha sido especialmente cierto en la esfera política, campo en donde el consensogeneral es que muchos de los principios de antaño vigentes deben ser sometidos a una urgente revisión.
Es por eso que México se encuentra comprometido en una reforma política a fondo para dar paso franco a la modernidad democrática. La agenda de esta discusión es amplia y ciertamente compleja. En ella se entrelazan múltiples factores que de manera visible han intervenido en el desempeño de loscuerpos legislativos, tanto a nivel local como federal.
Con este fin se han revisado los distintos aspectos relativos al modo en que se integra la institución, pero también a su vínculo con los otros poderes que conforman el Estado Mexicano. En ese sentido, no poco se ha hablado de la necesidad de reforzar su carácter de órgano representativo de la ciudadanía, y de contrapeso del PoderEjecutivo al actuar como encargado de fiscalizar las actividades gubernamentales.
En el cumplimiento eficaz de ambas labores, sin embargo, proceder a eliminar la restricción que existe a la reelección inmediata de los legisladores podría significar un avance importante. Este punto de considera un requisito indispensable para elevar la calidad del trabajo parlamentario en México.
A pesar deesto, el asunto es todavía objeto de polémica en algunos círculos. No ocurre así en otros países del orbe, donde, salvo raras excepciones, la posibilidad de reelección continua de los parlamentarios es ampliamente reconocida como una cuestión lógica en el funcionamiento de los regímenes democráticos.
El curso seguido por la reelección parlamentaria en México puede dar lugar a muy diversasreflexiones, según la perspectiva que se adopte. Desde el punto de vista de nuestra tradición constitucional, no existe huella alguna de negativa a este respecto, sino en la Carta de Apatzingan (1814), cuyo artículo 57 establece que los diputados no serán reelectos, “si no es que medie el tiempo de una diputación”
En cambio, las constituciones federales de 1824 y 1857, al igual que los documentoscentralistas de 1836, 1843, y 1847, determinan que los legisladores pueden ser reelectos en forma indefinida. Consideración similar se incorpora en la reorganización del Poder Legislativo en 1874, y posteriormente, en la Carta de Querétaro de 1917, al no incluir ninguna taxativa en tal sentido.
Ciertamente, en esta última experiencia el dictamen de la comisión encargada de revisar los artículos 80al 90 y 92 del proyecto presentado por el Primer Jefe Constitucionalista Venustiano Carranza, se pronuncia por la “prohibición absoluta de que la persona que una vez ha ejercido el alto encargo de Presidente de la República, vuelva a ejercerlo”. En concordancia con esta apreciación, la asamblea estima esta medida como imprescindible al figurar como una de las principales banderas del movimientorevolucionario apenas finalizado.
En lo que toca a la reelección de los integrantes de la Legislatura, no se contempla en absoluto ninguna prohibición. Este hecho se comprueba al no acusarse tendencia alguna en ese sentido, ni en el dictamen, ni en las discusiones sostenidas por el pleno durante la aprobación de las discusiones relativas a la integración de las Cámaras del Congreso.[1]
Después deintensas discusiones a lo largo de varios años de disputa entre distintas fracciones del élite en el poder, no obstante, en abril de 1933 se da paso a una reforma constitucional que incluye la improcedencia de la reelección inmediata para los parlamentarios.[2] No sin antes vencer férreas resistencias, la medida se acepta en aras de evitar la formación de círculos oligárquicos en el cuerpo...
Nada ni nadie puedes resistirse al cambio y, ciertamente nuestro país no es en forma alguna la excepción a esta regla. De hecho, bien podría afirmarse que en los últimos tiempos, por diversas circunstancias, este proceso se ha visto acelerado como pocas veces en el pasado. Ello ha sido especialmente cierto en la esfera política, campo en donde el consensogeneral es que muchos de los principios de antaño vigentes deben ser sometidos a una urgente revisión.
Es por eso que México se encuentra comprometido en una reforma política a fondo para dar paso franco a la modernidad democrática. La agenda de esta discusión es amplia y ciertamente compleja. En ella se entrelazan múltiples factores que de manera visible han intervenido en el desempeño de loscuerpos legislativos, tanto a nivel local como federal.
Con este fin se han revisado los distintos aspectos relativos al modo en que se integra la institución, pero también a su vínculo con los otros poderes que conforman el Estado Mexicano. En ese sentido, no poco se ha hablado de la necesidad de reforzar su carácter de órgano representativo de la ciudadanía, y de contrapeso del PoderEjecutivo al actuar como encargado de fiscalizar las actividades gubernamentales.
En el cumplimiento eficaz de ambas labores, sin embargo, proceder a eliminar la restricción que existe a la reelección inmediata de los legisladores podría significar un avance importante. Este punto de considera un requisito indispensable para elevar la calidad del trabajo parlamentario en México.
A pesar deesto, el asunto es todavía objeto de polémica en algunos círculos. No ocurre así en otros países del orbe, donde, salvo raras excepciones, la posibilidad de reelección continua de los parlamentarios es ampliamente reconocida como una cuestión lógica en el funcionamiento de los regímenes democráticos.
El curso seguido por la reelección parlamentaria en México puede dar lugar a muy diversasreflexiones, según la perspectiva que se adopte. Desde el punto de vista de nuestra tradición constitucional, no existe huella alguna de negativa a este respecto, sino en la Carta de Apatzingan (1814), cuyo artículo 57 establece que los diputados no serán reelectos, “si no es que medie el tiempo de una diputación”
En cambio, las constituciones federales de 1824 y 1857, al igual que los documentoscentralistas de 1836, 1843, y 1847, determinan que los legisladores pueden ser reelectos en forma indefinida. Consideración similar se incorpora en la reorganización del Poder Legislativo en 1874, y posteriormente, en la Carta de Querétaro de 1917, al no incluir ninguna taxativa en tal sentido.
Ciertamente, en esta última experiencia el dictamen de la comisión encargada de revisar los artículos 80al 90 y 92 del proyecto presentado por el Primer Jefe Constitucionalista Venustiano Carranza, se pronuncia por la “prohibición absoluta de que la persona que una vez ha ejercido el alto encargo de Presidente de la República, vuelva a ejercerlo”. En concordancia con esta apreciación, la asamblea estima esta medida como imprescindible al figurar como una de las principales banderas del movimientorevolucionario apenas finalizado.
En lo que toca a la reelección de los integrantes de la Legislatura, no se contempla en absoluto ninguna prohibición. Este hecho se comprueba al no acusarse tendencia alguna en ese sentido, ni en el dictamen, ni en las discusiones sostenidas por el pleno durante la aprobación de las discusiones relativas a la integración de las Cámaras del Congreso.[1]
Después deintensas discusiones a lo largo de varios años de disputa entre distintas fracciones del élite en el poder, no obstante, en abril de 1933 se da paso a una reforma constitucional que incluye la improcedencia de la reelección inmediata para los parlamentarios.[2] No sin antes vencer férreas resistencias, la medida se acepta en aras de evitar la formación de círculos oligárquicos en el cuerpo...
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