Relaciones Educativas De Don Bosco

LA RELACIÓN EDUCATIVA DE DON BOSCO
Tal vez el título no es el más feliz para el tema que queremos estudiar en este momento de nuestra formación permanente.
El tema que deseamos afrontar en este estudio de la vida de Don Bosco es su capacidad de relación, de amistad, de encuentro con los demás. ¿Cuál fue el secreto de su relación educativa?
Como Juanito quedó huérfano desde temprana edad,fácilmente, se podría pensar que fue un niño retraído, tímido y cosas por el estilo. Sin embargo, no es así. Desde pequeño mostró una gran capacidad para relacionarse con los demás, para entablar conversación con personas aún mayores que él y, sobre todo, desarrolló la capacidad de hacerse amigo. Son muchos los datos que encontramos en su vida que nos hablan de esta cualidad extraordinaria con que fueadornado nuestro santo fundador.
Desde el sueño de los nueve-diez años recibe las indicaciones y el método para hacerse amigo y para atraer a los otros a su amistad. El secreto está en hacérselos amigos.
En nuestra tarea educativa con los jóvenes tenemos la oportunidad de estar en contacto con los jóvenes porque ellos llegan a nuestra obra. Ellos llegan. Nosotros debemos hacer el movimiento deir hacia ellos.
El presente tema quiere suscitar en cada uno de nosotros una reacción, una pregunta, un cuestionamiento. ¿Cómo estoy en mi relación con los jóvenes? ¿Me perciben como padre, maestro y amigo?
TEMA DE REFLEXION
Las siguientes ideas las expresa Mario L. Peresson, en su libro “Educar con el corazón de Don Bosco”, ed. CCS, Madrid, 2010, pp. 303 y ss.
El Sistema Preventivo, comoexperiencia espiritual educativa, supone y exige una actitud de fondo: la simpatía y la voluntad de estar en medio de los jóvenes y la inserción en el mundo juvenil y popular. No se trata de una obligación o de una estrategia o táctica pedagógica, sino de una actitud que nace del amor hacia ellos, que implica una ruptura y un «éxodo» y desarraigo, no sólo geográfico, sino prioritariamente social,cultural e institucional, aunque todo ello cueste sacrificios. Se trata de una opción de fondo de hacer una inserción querida, buscada. En ella hallamos la alegría y el sentido de nuestra existencia entregada a Dios y vemos el lugar y la mediación de nuestro encuentro con el Señor.
Ya desde niño y joven sacerdote, Don Bosco mostró esta actitud de cercanía, de estar con los jóvenes y de encarnaciónen el mundo juvenil y popular.
Recordemos el primer encuentro y el diálogo con Don Calosso en 1826, cuando Juanito tenía 11 años, con motivo de la misión que tuvo lugar en Buttigliera:
«—¿Te gustaría estudiar?, le pregunta Don Calosso.
—Mucho, mucho.
— ¿Qué te lo impide?
—Mi hermano Antonio.
— ¿Y por qué Antonio no quiere dejarte estudiar?
—Porque él no deseó ir a la escuela y no quiereque otro pierda tiempo estudiando como él lo perdió; pero si pudiera ir; sí que estudiaría y no perdería el tiempo.
— ¿Por qué motivo deseas estudiar?
—Para ser sacerdote.
— ¿Y por qué razón aspiras a ser sacerdote?
—Para acercarme, charlar e instruir en la religión a tantos compañeros míos, que no son malos, pero llegan a ser tales, porque nadie se ocupa de ellos».
La muerte de Don Calossofue, en expresión del mismo D Bosco, un «desastre irreparable». Mamá Margarita lo mandó entonces a Capriglio, para que estuviera algún tiempo con el abuelo y así se atenuara su pena.
«Mientras tanto, escribe Don Bosco, pensaba constantemente sobre cómo avanzar en los estudios. Conocía unos cuantos buenos sacerdotes que desarrollaban el sagrado ministerio; pero con ninguno de ellos podía establecerun trato familiar.
Con frecuencia, tuve ocasión de encontrarme por la calle a mi párroco con el coadjutor. Los saludaba de lejos y, al acercarme, hacía también una reverencia. Pero ellos me devolvían el saludo de un modo grave y cortés, prosiguiendo sin más su camino. Muchas veces, llorando, me decía a mí mismo y también a otros: “Si yo fuera sacerdote, me gustaría actuar de otro modo; querría...