Resonancia Schumann

Hace algunos días mi hijo menor, XXXX de 9 años, me dijo que le parecía que el tiempo pasaba muy rápido, argumentando para esto, que no se había dado cuenta como ya estaba al final de su semestre enel colegio, siendo que recién había vuelto de vacaciones de verano. Esto no es muy extraño si lo vemos desde nuestra perspectiva, a todos nosotros nos pasa el tiempo muy rápido… y cada vez más, segúnpercibimos.
Sin embargo, si nos situamos a nuestros 9 años, recordaremos que la situación era distinta, a mi particularmente se me hacía eterno el semestre escolar y, mi percepción de la vida engeneral era que esta tenía un transcurso más bien lento.
Qué ha cambiado?
Dejando a un lado el fenómeno de dilatación o contracción en la percepción del paso del tiempo producido durante situacionespuntuales, por responder esto a un estado anímico particular generado por la circunstancia; podré intentar algunas respuestas sin pretender entrar en las profundidades de la ciencia detrás de ellas.Siempre oímos a nuestros mayores que el tiempo les pasaba muy rápido. Si de esta afirmación podemos concluir, apresuradamente tal vez, que: mientras más viejo eres, más rápido te pasa el tiempo,entonces, probablemente el ritmo de las funciones orgánicas, marque de cierta forma el modo como percibimos este transcurrir, sin embargo esta explicación deja afuera al XXXXX y su reloj de alta velocidad.Para ser inclusivo con el niño, podemos intentar explicar esto como un fenómeno originado en la locura de la vida actual, donde todo es casi instantáneo y, sumándose a ello el cúmulo enorme deestímulos e información con los que somos bombardeados a cada instante, provocaría en nosotros la sensación generalizada de tiempo acelerado. Hasta aquí todo es razonable, sin embargo, como se explica queuna persona que vive aislada de nuestra civilización tecnológica actual, por ejemplo un campesino, también coincide en percibir que el tiempo pasa más rápido?
Será que existe alguna constante global...