Ritos Posibles par aun 18 de mayo de 1811

RITOS POSIBLES PARA UN 18 DE MAYO
Raúl D. Cheda Espiga1

Los 18 de mayo de cada año, los piedreños no festejarnos la Batalla de Las Piedras de
1811, definir qué festejamos entonces, es mi propuesta.
Comencemos esta conversación, analizando la característica o la fundamental
característica de lo que llamamos “memoria colectiva”. Es decir, qué y de qué manera,
retiene la memoria colectiva deuna población, un hecho o personaje que marca su
sensibilidad, en la medida que ese hecho o personaje se aleja en el tiempo.
Mircea Eliade plantea que: “(...) la memoria popular retiene difícilmente
acontecimientos individuales y figuras auténticas. Funciona por medio de estructuras
diferentes; “categorías” en lugar de acontecimientos, “arquetipos” en vez de personajes
históricos” .
Endistintos ámbitos etnológicos, ha observado que a los dos o tres siglos de un evento
de fuerte impacto social, el mismo desaparece de la memoria colectiva, salvo que sea
convertido en un arquetipo, que el protagonista se convierta en héroe o el
acontecimiento en una situación ejemplar.
“(...) el recuerdo de los acontecimientos históricos y de los personajes auténticos es
modificado al cabo de doso tres siglos, a fin de que pueda entrar en el molde de la
mentalidad arcaica, que no puede aceptar lo individual y sólo conserva lo ejemplar (...)
la memoria colectiva es ahistórica, afirma Eliade.”.
El caso que analizamos, se concentra en un personaje y un evento histórico, José G.
Artigas y la Batalla de Las Piedras, del 18 de Mayo de 1811.
Repasemos brevemente la introducción del Librodel Centenario de la Batalla de Las
Piedras , que nos permitirá conocer el escenario intelectual hacia 1900 con respecto a la
figura de José G. Artigas. En el 900, recuerda Abel Pérez, aún no había Cátedra de
Historia Nacional “(...) sólo vivía la tradición oral, casi siempre apasionada, con
acentuadas tonalidades partidistas y que, según el criterio de cada cual, hacía de cada
hombre ya unarcángel ya un demonio (...) en esa época tumultuosa nadie hablaba de
Artigas sino para execrarlo; pesaba sobre é1 una leyenda odiosa; su nombre
pronunciado con desdeñoso desprecio (...) Era la eterna protesta contra el crimen, la
encarnación simbólica de la barbarie criolla, ignorante, brutal y sanguinaria. El nombre
de Artigas entrañaba una vergüenza nacional; todos nos sentíamos culpables, encierta
parte de sus maldades y nos creíamos salpicados por la sangre inocente que él
derramó”.
¿Cómo pasa Artigas desde esta imagen vergonzosa a convertirse en un Héroe Nacional,
exactamente el 18 de mayo de 1911?
El tránsito del personaje histórico hacia un arquetipo, en nuestro caso, parte en el
momento que se le reconoce a José G. Artigas, una vida ejemplar, entendiendo como
ejemplar,aquello “digno de ser imitado”, porque, como ilustra Eliade, vivir y repetir
hechos ejemplares, desde el punto de vista de esta mentalidad, es vivir en la realidad,
porque esa repetición refleja lo categorizado como verdad, es decir, real.
1

Postgrado de Investigación en Historia Contemporánea (CLAEH)

La construcción arquetípica en que Artigas es convertido en héroe, no se realiza sobreun Artigas vencedor, porque en definitiva si hacemos un balance entre las victorias y las
derrotas que sufrió desde el punto de vista militar y político, nos inclinaríamos a pensar
que son más las derrotas que las victorias. Artigas, es heroizado en una “cruzada
piadosa” en una “santa evocación al patriotismo” sobre el reconocimiento de una
personalidad “ejemplar”:
“La consagración ( de lapersonalidad eminente de Artigas) fue espontánea en todo el
territorio de la República (...) no al Artigas que ganaba batallas, esbozaba la
organización futura de un gran pueblo y sembraba en el surco que abría con su acción
las simientes generosas de las grandes conquistas del porvenir, sino al Artigas
desconocido y vilipendiado hasta ayer, el Artigas perseguido y proscrito, el Artigas de...