Síntesis de vs nn. 71-83
Páginas: 6 (1446 palabras)
Publicado: 8 de noviembre de 2011
Santiago García Mourelo
Síntesis de VS nn. 71-83
Teleología y teleologismo
La vida moral posee un carácter teleológico esencial, porque consiste en la ordenación deliberada de los actos humanos a Dios, Sumo Bien y Fin (telos) último del hombre (n. 73). Pero esta ordenación al fin último no es una dimensión subjetivista que dependa solo de la intención. La vida moral presupone que talesactos sean en si mismos ordenables al fin ultimo, cuando son conformes al autentico bien moral del hombre, tutelado por los mandamientos.
Sin embargo, han aparecido algunas corrientes morales que ponen énfasis en el fin que persiguen las personas al actuar, de ahí que, en conjunto, reciban el nombre de Teleologismo (n.74).
El teleologismo afirma que los criterios para valorar la rectitudmoral de la acción se toman de la ponderación de los bienes que hay que conseguir o de los valores que hay que respetar. Es decir, el comportamiento concreto sería recto o equivocado según pueda o no producir un estado de cosas mejores para todas las personas interesadas.
El teleologismo reviste dos variantes: el consecuencialismo y el proporcionalismo (n.75).
El consecuencialismo pretende obtenerlos criterios morales solo del cálculo de las consecuencias que se prevé pueden derivarse de la ejecución de una decisión. El proporcionalismo, ponderando entre sí los valores y los bienes que se persiguen, se centra más bien en la proporción reconocida entre los efectos buenos o malos, en vista del bien más grande o del mal menor, que sean efectivamente posibles en una situación determinada.Ambas corrientes no admiten que se pueda formular una prohibición absoluta de comportamientos determinados que, en cualquier circunstancia y cultura, contrasten con los valores morales. Lo importante –según esta doctrina– es la intención con que se realizan las acciones y las consecuencias favorables o no que se originen.
La responsabilidad de los actos se orientan según un doble aspecto: elaspecto moral, con relación a valores propiamente morales, como el amor a Dios, la justicia, etc. Y el aspecto pre-moral, con relación a las ventajas e inconvenientes que se originan del acto mismo.
En este sentido, la moralidad del acto se juzgaría de modo diferenciado: la bondad moral del acto descansaría sobre la base de la intención del sujeto, referida a los bienes morales, y la rectituddel acto se apoyaría sobre la base de los efectos o consecuencias previsibles. Por tanto, los comportamientos concretos serían rectos o equivocados, sin que por esto sean buenos o malos.
Esto supone que la bondad o maldad está dada exclusivamente por la fidelidad de la persona a los valores más altos de la caridad y de la prudencia, sin que esta fidelidad sea incompatible con decisionescontrarias a ciertos preceptos particulares. Incluso, los preceptos negativos deberían ser considerados como normas operativas siempre relativas y susceptibles de excepciones.
El error del Teleologismo radica en que se olvida del objeto moral (que determina la bondad o malicia de los actos concretos) y pone énfasis en la intención y en las circunstancias (las consecuencias son circunstancias de laacción).
El objeto del acto deliberado (n. 76)
Esta teoría puede adquirir fuerza persuasiva por su afinidad con la mentalidad pragmática, preocupada de ordenar las actividades técnicas y económicas con base en el cálculo de los recursos y los beneficios de los procedimientos y efectos.
Juan Pablo II rechaza estas teorías con fuerza, declarando que «no son fieles a la doctrina de la Iglesia, encuanto creen poder justificar, como moralmente buenas, elecciones deliberadas de comportamientos contrarios a los mandamientos de la ley divina y natural» (n. 76). Afirma el Papa que este modo de evaluar los actos humanos «no es un método adecuado para determinar si la elección de aquel comportamiento concreto es, "según su especie" o "en sí misma" moralmente buena o mala, lícita o ilícita»...
Síntesis de VS nn. 71-83
Teleología y teleologismo
La vida moral posee un carácter teleológico esencial, porque consiste en la ordenación deliberada de los actos humanos a Dios, Sumo Bien y Fin (telos) último del hombre (n. 73). Pero esta ordenación al fin último no es una dimensión subjetivista que dependa solo de la intención. La vida moral presupone que talesactos sean en si mismos ordenables al fin ultimo, cuando son conformes al autentico bien moral del hombre, tutelado por los mandamientos.
Sin embargo, han aparecido algunas corrientes morales que ponen énfasis en el fin que persiguen las personas al actuar, de ahí que, en conjunto, reciban el nombre de Teleologismo (n.74).
El teleologismo afirma que los criterios para valorar la rectitudmoral de la acción se toman de la ponderación de los bienes que hay que conseguir o de los valores que hay que respetar. Es decir, el comportamiento concreto sería recto o equivocado según pueda o no producir un estado de cosas mejores para todas las personas interesadas.
El teleologismo reviste dos variantes: el consecuencialismo y el proporcionalismo (n.75).
El consecuencialismo pretende obtenerlos criterios morales solo del cálculo de las consecuencias que se prevé pueden derivarse de la ejecución de una decisión. El proporcionalismo, ponderando entre sí los valores y los bienes que se persiguen, se centra más bien en la proporción reconocida entre los efectos buenos o malos, en vista del bien más grande o del mal menor, que sean efectivamente posibles en una situación determinada.Ambas corrientes no admiten que se pueda formular una prohibición absoluta de comportamientos determinados que, en cualquier circunstancia y cultura, contrasten con los valores morales. Lo importante –según esta doctrina– es la intención con que se realizan las acciones y las consecuencias favorables o no que se originen.
La responsabilidad de los actos se orientan según un doble aspecto: elaspecto moral, con relación a valores propiamente morales, como el amor a Dios, la justicia, etc. Y el aspecto pre-moral, con relación a las ventajas e inconvenientes que se originan del acto mismo.
En este sentido, la moralidad del acto se juzgaría de modo diferenciado: la bondad moral del acto descansaría sobre la base de la intención del sujeto, referida a los bienes morales, y la rectituddel acto se apoyaría sobre la base de los efectos o consecuencias previsibles. Por tanto, los comportamientos concretos serían rectos o equivocados, sin que por esto sean buenos o malos.
Esto supone que la bondad o maldad está dada exclusivamente por la fidelidad de la persona a los valores más altos de la caridad y de la prudencia, sin que esta fidelidad sea incompatible con decisionescontrarias a ciertos preceptos particulares. Incluso, los preceptos negativos deberían ser considerados como normas operativas siempre relativas y susceptibles de excepciones.
El error del Teleologismo radica en que se olvida del objeto moral (que determina la bondad o malicia de los actos concretos) y pone énfasis en la intención y en las circunstancias (las consecuencias son circunstancias de laacción).
El objeto del acto deliberado (n. 76)
Esta teoría puede adquirir fuerza persuasiva por su afinidad con la mentalidad pragmática, preocupada de ordenar las actividades técnicas y económicas con base en el cálculo de los recursos y los beneficios de los procedimientos y efectos.
Juan Pablo II rechaza estas teorías con fuerza, declarando que «no son fieles a la doctrina de la Iglesia, encuanto creen poder justificar, como moralmente buenas, elecciones deliberadas de comportamientos contrarios a los mandamientos de la ley divina y natural» (n. 76). Afirma el Papa que este modo de evaluar los actos humanos «no es un método adecuado para determinar si la elección de aquel comportamiento concreto es, "según su especie" o "en sí misma" moralmente buena o mala, lícita o ilícita»...
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