Sala de juegos terapeutica, un espacio diferente

Ateneo: Sala de juegos terapéutica, un espacio diferente

No me ha sido nada fácil sentarme y concretar de una vez este tan esperado Ateneo. Creo que porque me refleja claramente un cierre, una despedida, una etapa que termina en la cual he aprendido muchas cosas y me cuesta dejarla atrás.
Retrotraerme al ingreso de la pasantía me implica volver a un momento de muchas incógnitas,respecto al lugar de la sala de juegos dentro de la institución, al objetivo de las intervenciones, al intercambio con otros profesionales, a mi rol concreto como psicóloga en la sala de juego, en el hospital y a la resonancia interna frente a los encuentros con los niños en esta situación particular de hospitalización.
De a poco, en el recorrido de estos dos años he ido encontrandorespuestas posibles a todas estas preguntas, he ido ensayando diferentes posibilidades y reflexionando sobre las diferentes experiencias por las que atravesé. Ha sido un camino paulatino y apropiado a mis tiempos, pero también un desafío paso a paso. Quiero compartir con ustedes algunas de las repuestas y reflexiones con las que me he ido encontrando.
Respecto al lugar de la “ Sala de Juegosterapéutica” creo que es un espacio privilegiado de acceso a la subjetividad de los pacientes y sus familias. Reflexionando sobre la existencia del espacio, lo considero un gran avance en la ruptura de la dicotomía cuerpo-mente que no ha sido fácil de erradicar (aun no logrado por completo) de nuestra cultura y de la Cs. Medica en particular.
Sin entrar en consideraciones respecto a laincidencia de factores psicológicos en la etiología de diversas enfermedades, considero que la hospitalización y la enfermedad orgánica en un niño, en sus diferentes niveles de gravedad, implica una situación crítica que expone al niño y a su familia a un alto grado de estrés físico y emocional. Esta situación trae consecuencias en su cuerpo, en el plano psíquico y en su mundo externo cotidiano que seve interrumpido o atravesado por la enfermedad y la hospitalización. Recuerdo a Mariano de 3 años, hermano de Martín, paciente con diagnóstico de intestino ultracorto, con mas de 10 meses de internación ininterrumpida. Ante la pregunta de otro nene con el que Mariano jugaba en la sala: “¿Vos sos de Tucumán?”, Mariano responde: “ yo soy del hospital”.
En este contexto, es que la Sala deJuegos terapéutica cobra un enorme valor al facilitar un espacio al paciente, padres y hermanos, diferente al del tratamiento médico específico, donde la perspectiva o la mirada intenta abarcar los diferentes planos alcanzados por la enfermedad y hospitalización.
Uno de los primeros pasos, en la institución y en el seguimiento de pacientes creo que tiene que ver con generar el espacio. Esalgo particular el lugar que ocupa el dispositivo dentro de la institución. Las interconsultas, la mayoría de las veces, no son solicitadas por otros profesionales (médicos). Tampoco el espacio es, en muchos casos, reclamado por el paciente y su familia. Sino que en las recorridas se lo dá a conocer y es recién en los primeros encuentros con el paciente cuando comienza a enmarcarse mas claramentela intervención.
He aprendido que gran parte del trabajo, o al menos uno de los objetivos que yo me he propuesto, ha tenido que ver con “la disponibilidad”, el mostrarme disponible sin invadir, forzar y a la vez estando atenta a cuando retirarme y pedir ayuda con la intervención de otro profesional, si fuera necesario. He aprendido también un poco mas sobre mis límites, como profesional ycomo persona, y he descubierto que llegan un poco mas allá de lo que imaginaba.
Respecto a la herramienta o medio de intervención, como su nombre lo indica, se trata de una “sala de JUEGOS terapéutica”. Me es ineludible referirme al juego como vía privilegiada para comprender la vida emocional del niño y como medio de elaboración.
Tal como lo manifestó Melanie de 12 años, con...