Tarea

Introducción
En este ensayo se hablara del dialogo que se llevo a cabo entre el cardenal Cario María Martini y Umberto Eco, que forma la primera parte de este libro, el cual apareció el 22 de marzo de 1995 y que comenzó en el primer número de la revista Liberal.
En la redacción aparecen las 8 cartas que ambas personas intercambiaron y contestaron con admirable puntualidad, el interés queprovoco entre los lectores de estas, por los temas tratados en un año causo que la discusión se ampliara a otros interlocutores involucrados de una o de otra manera en el tema: dos filósofos (E. Severino y M. Sgalambro), dos periodistas (E. Scalfari e I. Montanelli) y dos políticos (V. Foa y C. Martelli). Sus «variaciones» aparecieron en el número 12.
Al final al cardenal se le propuso que realizarauna síntesis en donde recapitulara algunos de los puntos importantes. Una réplica con funciones de clarificación y, ¿por qué no?, de ulterior relanzamiento.

Desarrollo
En la carta “La obsesión laica por un nuevo Apocalipsis“, Umberto eco se dirige al cardenal Carlo María Martini pidiéndole no lo considere un irrespetuoso al llamarle por su nombre y no por el de cardenal ya que lo hace porhomenaje ya que los franceses cuando se dirigen a un escritor, a un actor o a una figura política evitan llamarle por los apelativos reductivos como: eminencia o ministro a diferencia a como lo hacen en Italia.
En esta carta se le dice al cardenal que resulta embarazosa la petición de la revista al pedir que un laico y un cardenal intercambien opiniones ya que podría parecer como si el laicoquisiera conducir al cardenal a expresar sus opiniones en cuanto a príncipe de la Iglesia y pastor de almas, lo que supondría una cierta violencia, tanto para quien es interpelado como para quien escucha. Menciona que al tocarle a el comenzar con el primer movimiento, no le parece que deban adentrarse en una cuestión de rabiosa actualidad, sobre la que quizá surgirían de inmediato posicionesexcesivamente divergentes.
Dice que lo mejor es alzar la mirada y plantear un argumento de discusión que, aun siendo en efecto de actualidad, hunde sus raíces lo suficientemente lejos y ha sido causa de fascinación, temor y esperanza para todos los componentes de la familia humana en el curso de los dos últimos milenios. Menciona que se están acercando al final del segundo milenio, y espera en Europa,contar los años que cuentan partiendo de un evento que tan profundamente y estarán de acuerdo incluso los fieles de cualquier otra religión o de ninguna ha influido en la historia del planeta. La cercanía de esta fecha no puede dejar de evocar una imagen que ha dominado el pensamiento durante veinte siglos: el Apocalipsis. Menciona sobre el final de los tiempos que del cual se viene hablando desdesiglos antes del apocalipsis del que se habla en el libro de Juan.

Libro bífido y terrible, el Apocalipsis de San Juan, junto con la secuela de Apocalipsis apócrifos a los que se asocia, apócrifos para el Canon, pero auténticos para los efectos, las pasiones, los terrores y los movimientos que han suscitado, puede ser leído como una promesa, aunque también como el anuncio de un final, y así hasido reescrito a cada paso, es esta espera del 2000, incluso por parte de quienes no lo han leído. No ya, pues, las siete trompetas, y el pedrisco y el mar que se convierte en sangre, y la caída de las estrellas, y las langostas que surgen con el humo del pozo del abismo» y los ejércitos de Gog y Magog, y la Bestia que surge del mar; sino el multiplicarse de los depósitos nucleares incontrolados eincontrolables, y las lluvias ácidas, y los bosques del Amazonas que desaparecen, y el agujero de ozono, y las migraciones de hordas de desheredados que acuden a llamar, a veces con violencia, a las puertas del bienestar, y el hambre de continentes enteros, y nuevas e incurables pestilencias, y la destrucción interesada del suelo, y los climas que se modifican, y los glaciares que se deshielan, y...