Tartarus

Páginas: 9 (2042 palabras) Publicado: 3 de junio de 2013
El pozo.
Me supuse muerto, debo admitir aún avergonzado, que pude haber predicho este bizarro sentimiento. Cuando sé que en realidad no es nada místico o esotérico fallecer -sino en realidad es soso- quisiera vivir un poco más.
Toda mi vida anhelé la muerte, la precisa inexistencia del caótico lugar donde pertenecí, casi como esclavo desde el traumático momento de la concepción. Ahora con lanoticia de mi suicidio, puedo crear la imagen clara de mi familia rompiendo en llanto por mi cobardía. Hasta en eso fui egoísta, supe la reacción, sin embargo en ciertas ocasiones me atrapa la indiferencia.
No me vi embarcado en ningún viaje astral, no vislumbre atontado a mi alma alejarse de mi corporeidad, más bien, al privarme de oxígeno, tuve un flashazo, acto seguido aparecí aquí. No mematerialicé lenta y psicodélicamente, y si fue así, no tuve percepción de ello. Todo resultó tan monótono.
Este limbo es un infierno, un castigo. De eso estoy seguro, no tengo conciencia del tiempo ¿Cuánto llevaré en este espacio en blanco? ¿Dos horas? ¿Medio día? ¿¡Qué estoy hablando!? Aquí no hay astros, los días y horas terrícolas no tienen el mínimo sentido aquí. Debo acostumbrarme…
Mi supuestamasa perdía forma, estaba olvidando como son los cuerpos humanoides, conforme transcurría el tiempo creo que atisbaba la verdadera singularidad de mi psique.
Desmayé mi conciencia unas cuantas veces. En la última pérdida del conocimiento, al despertar, encontré un ente postrado frente a mí. Una especie de cactus con ocho ojos grandes y faltos de vivacidad, muy opacos. Poseía seis brazoslarguiruchos con cuatro dedos cortos e inflamados en cada uno. Todo recubierto de una agrietada piel grisácea, con movimientos semejantes a una gelatina repulsiva.
—Rastiel, acompáñame— se plasmó una pálida boca en el ente, y habló. Sentí que caía del susto, o tal vez fuera más la sorpresa — Pe-pero, te has confundido, ese no es mi nombre— titubeé, empero el mensaje fue captado.
—El nombre de tucuerpo, sólo es válido en Gaia, en territorios de los muertos, tu ánima tuvo un bautizo desde la creación, y siempre será llamada según ese nombre al volver, bienvenido Rastiel— explicó en su voz profunda, con un eco que me irritaba.
Con un elegante ademán me indicó le siguiera, obedecí. Deambulamos dentro y hacia la nada un largo tiempo, no supe cuanto. Finalmente se detuvo gentilmente y como era deesperarse, en medio de la nada.
Nada ocurría, mi desesperación escribía palabras en mi garganta anímica — ¿Y por qué has parado el rumbo? ¿Qué debo suponer que hacemos perdidos a mitad de este desierto incoloro? — Le medio grité algo encolerizado. Al darse cuenta de mi pretensión, se volteó y me lanzó ocho miradas con desdén, y regresó su vista al frente.
— ¡Octélium, sé frente a nosotrosportador del camino!— Chilló mi guía con un grito ensordecedor.
Oí un fuerte batir de alas en lo alto, se condensaron unas cuantas nubes oscuras pero extraordinarias encima de nosotros, de ahí bajó un gigantesco cuervo de un solo ojo, las plumas se le desprendían, pero le brotaban más al instante, lo cual causaba un efecto visual hipnotizante en su plumaje.
—Comienzas a hartarme Elliot, ya estoyanciano, no soy el mismo de antes, cuantas eternidades perdidas… ¡Argh! Más vale que tengas una buena ánima para los viejos— Gruñó el desgastado cuervo que supuse tenía por nombre Octélium. Yo me quedaba pasmado al ver como negociaban con lo que era yo.
— No seas quejumbroso Octélium, éste es y será siempre tu labor. Y no te imaginas a quien he conseguido de vuelta, encontré en el limbo número 3, almismísimo Rastiel, como de costumbre tuvo vida tan mísera en ese pútrido mundo que no recuerda quien es. Pero lo ganamos nuevamente a los imbéciles querubines— parloteaba el cactus reconocido como Elliot, iba formando en mi mente poco a poco el contexto en base a estas pistas difusas.
— Así que… ¿Rastiel, eh? ¿Sigues siendo la misma criatura terca de siempre? Qué pena si así fuera, a veces...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Tartarus

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS