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De Kuhn a Latour: la investigación, la ciencia y los estudios sociales de la ciencia

La investigación es el proceso, la ciencia es el producto. Así, no todo investigador es en realidad un científico. Pero adicionalmente lo que se presenta como la ciencia es un producto abstracto, consecuente a una especie de “purificación” de las producciones de las ciencias. Muchos mitos se han planteado entorno a la investigación y la ciencia, algunos de los cuales, convertidos en lugares comunes, llegan a reproducirse en los libros de texto y en la enseñanza en todos los niveles, incluyendo los de licenciatura y posgrado. Incluso quienes se dedican a la actividad científica y no reflexionan sobre su propia práctica, muchas veces tienen una percepción confusa de la ciencia y de su propio papel comocientíficos. La falta de asignaturas o cursos donde se estudie la manera como se ha producido el conocimiento en la historia y se reflexione acerca de su práctica ha conducido a que, en los hechos, muchos científicos y estudiantes de ciencias tengan una visión extremadamente ingenua acerca de su quehacer. Hablar de una ciencia o practicarla sin una visión de su génesis, conduce indefectiblementeal reduccionismo y a una visión tecnocrática y acrítica de la realidad. En consonancia, resulta del todo cuestionable que en las curricula de enseñanza de la ciencia, no se incluyan cursos en los cuales se busque un análisis y reflexión acerca del surgimiento de los conceptos y teorías fundamentales de las disciplinas de las que se trata. Es así que el estudiante, quien en el mejor de los casosllegará a ser un nuevo científico, se forma con una concepción de la ciencia incongruente con la realidad, dado que su desarrollo se le muestra en todo momento como algo idílico, lineal y acumulativo,1 como “un conjunto de relatos de caballería”.2 La visión positivista, extremadamente acendrada en México –si bien no en la versión comteana, barrediana original, ni tampoco la spenceriana3, sino en unavariante ingenua–, ha contribuido sin duda alguna a la consolidación de una concepción errónea de la investigación y la ciencia. Dicha concepción posee también una gran influencia en los Estados Unidos, cuyos modelos y patrones de investigación han impactado a nuestro país a partir de la posguerra, de manera tal que la simplificación y la ingenuidad se entronizaron de acuerdo al mito del llamado“método científico”. Estas concepciones tradicionalistas de la ciencia, su historia y sus relaciones con la sociedad constituyen lo que se ha dado en llamar la tradición heredada, o la leyenda (Kitcher),4 se enfrentaron a una fuerte crítica a partir de los años sesenta, fundamentalmente a consecuencia de la publicación de la obra La estructura de las revoluciones científicas de T.S. Kuhn en 1962, 5lo que marcó un parteaguas en la historia de los estudios acerca de la ciencia. A partir de ese momento, paulatinamente comenzaron a aparecer autores que criticaron la manera como se concebía a la ciencia y surgieron diferentes corrientes. En el ámbito de la filosofía de la ciencia, merece especial mención la obra de Paul K. Feyerabend Contra el método, esbozo de una teoría anarquista delconocimiento y su Tratado contra el método, y en el campo de la sociología de la ciencia, a partir de los setenta surgieron autores como Mulkay, Knorr-Cetina, Collins, Pinch, Bloor, Barnes, Dolby, MacKenzie, Pickering, Shapin, Garfinkel, Lynch, Livingston, quienes marcaron una ruptura con respecto a la sociología de la ciencia de corte funcionalista representada por Robert K. Merton. Sin embargo, en Méxicoy en muchos otros países Kuhn fue traducido tardíamente, lo que tuvo como repercusión que la visión del positivismo ingenuo siguiera enseñoreada de la enseñanza de la ciencia. La primera traducción de Kuhn al castellano se realizó en México por el Fondo de

Cultura Económica en el año de 1972, a partir de la segunda edición en inglés de 1970, que ya contiene la famosa “postdata 1969”,...