trabajo terminado




INTRODUCCION
Nosotras las alumnas de la Escuela Provincial de Comercio N°1 “Carlos E. Ibarra”, de 4° 3° turno mañana: Alcoba Sofía; Vásquez Lucía, realizamos esta monografía para profundizar cual era el rol del hombre y la mujer en la edad media; a través de las novelas que hemos leído: “El Mío Cid” y “El Lazarillo de Tormes” lo cual ambos libros tienen el tema en común.
Este trabajoestá basado en la vida de dos personas muy distintas; ya que ambos estaban en distintas estamentos sociales de aquella época.
En una obra resalta más la manera en que se valoraba a la mujer; y en la otra la toma como un objeto. En el caso del hombre en una novela es un guerrero, caballero y en la otra es un sirviente muy pícaro.
Estas historias tienen un contexto histórico similar; ya quehablan casi de la misma etapa de la historia pero claramente en distintas culturas. Ninguna de las dos obras tiene un autor reconocido, es decir, son anónimas; pero con el cantar del Mio cid se creía que el autor era Per Abbat y muchos otros que se han hecho pasar por creadores de esta obra pero se demostró que todos eran copistas.
Hacemos este estudio porque queremos hacer conocer; laimportancia del hombre y la mujer de ambas novelas, ya que son tan distintas entre sí. Además; porque nos llamó la atención redactar la forma de actuar; vivir; socializar; de ambos sexos.
Por ello es que nos aventuramos a emprender este humilde trabajo.




EL ROL DE LA MUJER
Durante esta época el hombre era el que tenía mucha libertad, mucho más que la mujer. Eran de tomar roles importantes, graciasa ellas las historias se desenvuelven de forma más interesante, ya que ellas siempre son o las víctimas o el punto central. Ellas solían ser vista como el ser más hermoso que existía en el universo que la tomaban como premio, tenían que encargarse de las tareas de la casa tanto como limpiar y cocinar, también tenían que satisfacer al hombre, que siempre era el protagonista podía obtenersabiduría, viajar, conocer y otras cosas que la mujer no podía hacer.
En lo que en la época del lazarillo las mujeres ya comienzan a desenvolverse más y comienzan a tener y dar sus propias opiniones, pero siempre siguen dependiendo de un hombre.
Según el poema del Mio Cid
La mujer en el poema es encarnada por doña Jimena, esposa del Cid, y por sus dos hijas, doña Sol y doña Elvira que se desarrollaen un clima de culto de héroe.
Ellas tienen una actitud sumisa; no opinaban sobre las decisiones que el hombre tomaba. La  función de doña Jimena eran las de "servir", no contradecir las opiniones de sus maridos; éstas eran fieles y consideraban que la moral de una mujer se basa en el respeto a su marido. Así el hecho de que él deje toda su ganancia a la mujer antes de irse al exilio esconsiderado como un gesto de gran honradez. Jimena, en este sentido, desempeña un papel muy importante, sobre todo con sus conmovedores rezos en la iglesia antes de que el Cid se marche. Son cosas importantes ya que hacen que el héroe obtenga un rango social y económico más alto. Sujeta a la autoridad del varón por ejemplo: El Cid ve a sus mujeres indefensas e incapacitadas para vivir sin un hombre quelas proteja; por eso decide dejarlas bajo cuidado del abad Don Sancho, a quien ordena según dice el poema:
“(…) de vos estoy agradecido (…), hoy que salgo de la tierra os daré cincuenta marcos (…). Dadles lo que necesiten, así os lo mando”;
Pero, al mismo tiempo puede demostrarse el amor que le tenía el Cid a sus mujeres:
“Doña Jimena, esposa honrada y bendita, tanto cariño os tengo comotengo al alma mía. Tenemos que separarnos, los dos en vida, A vos os toca quedaros, a mí me toca la ida”
En el segundo cantar, cuando el rey le pide las hijas al Cid para casarlas con los infantes de Carrión, él hace constar una y otra vez que el rey es quien las casa, no él. Y en el poema se anuncia con la voz de Rodrigo:
“Yo no quería casarlas, que no tienen mucha edad (…). A lo que mandéis...