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UNA TEORÍA CONSTITUCIONAL

TERCERA PARTE: LA CONSTITUCIÓN COMO NORMA

1. ¿ES POSIBLE UNA TEORÍA GENERAL DE LAS CONSTITUCIONES?

DIFICULTAD EPISTEMOLÓGICA: DIVERSOS TIPOS DE TEORÍAS DE LA CONSTITUCIÓN

Esta tercera parte del curso intenta formular una teoría general de la constitución de los Estados contemporáneos (de los Siglos XX y principios del XXI). Aquí se intentará elaborar unaconceptuación básica que dé cuenta deL instrumento político-jurídico de los Estados actuales, que llamamos “constitución”: sus distintos significados, sus diferentes funciones, sus contenidos y su utilidad. Se trata de una teoría general de las constituciones, que pretende universalidad y sello de objetividad, como corresponde a la teoría científica de las ciencias sociales

Sin embargo,aunque estas elaboraciones teóricas pretendan formular una teoría general y única que sirviera como herramienta analítica para estudiar y comprender la constitución de cualquier modelo de Estado, en verdad resulta muy difícil hacer una teoría constitucional “pura” (en sentido kelseniano), es decir, al margen del modelo de Estado hoy dominante y hegemónico en todo el mundo: el modelo de Estadodemocrático constitucional de derecho. El problema lógico (y aún epistemológico) de una teoría o ciencia general de la constitución se plantea de entrada en los siguientes términos ¿Cómo elaborar una teoría general que sirva para dar cuenta de constituciones tan disímiles entre sí –no sólo en cuanto a contenido sino en cuanto al papel que cumplen- como las de Estados, China, España, Irán y Venezuela?Seguramente cuando hablamos de constitución en cada uno de estos ejemplos, no siempre estaremos hablando de lo mismo. En el lenguaje que ha venido ganando uso extendido, cuando hoy se emplean las palabras “constitución” y de “constitucionalismo” es casi inevitable remitirse al modelo de Estado constitucional y democrático de derecho a su propia forma específica de legitimidad como forma de organizacióndel poder político. En este sentido, la teoría de la constitución es una doctrina de la legitimidad –una ideología normativo-prescriptiva- y no una teoría científica –de naturaleza descriptivo-explicativa- o ciencia jurídica para la descripción y explicación objetivas del Estado. Por ello, el ámbito de validez de esta teoría constitucional se circunscribe a aquellos Estados que se rigen por laorganización político-institucional propia del mundo liberal, es decir a las sociedades capitalistas y de tradición occidental. Esta limitación ideológica de este tipo de teoría constitucional (de raíz democrático-liberal) no llega hoy a restringir demasiado su ámbito de aplicación, toda vez que asistimos a lo que se denomina la universalización –expansión mundial- del modelo de Estado constitucionaldemocrático de derecho, al menos como discurso de referencia.1

Lo anterior llevaría a diferenciar entre la teoría general o universal de la constitución –como parte de la teoría general del Estado- y una teoría democrático-liberal de la constitución (doctrina del constitucionalismo). El problema se torna aún más complejo porque no se agota en estas dos clases de teorías ladiversidad de tipos de discursos constitucionales.

En efecto, encontramos un tercer tipo de teoría constitucional: el discurso que los juristas manejan cotidianamente como un instrumento conceptual que les permite leer con lucidez los textos de su Constitución y operar con ellos. A esta herramienta teórica se le conoce tradicionalmente como “dogmática constitucional” y está destinada a servir deherramienta útil para la eficaz aplicación de una determinada Carta constitucional vigente en un país determinado en un momento histórico determinado. Como se verá más adelante, la tarea que cumple la “dogmática constitucional” -descripción sistemática e interpretación de los contenidos de una determinada constitución- exige, como prerrequisito, contar con una elaboración conceptual apropiada, es...