Ulises

Era un frío día de invierno. nos encontrábamos entre la calidez de un radiador y y los zombies del call of duty, cuando uno de estos me ataco por la espalda. mi susto no fue menos que casi un ataqueal corazón y, por si no fuera poco mi descontento ante mi muerte, dado que ya había mejorado todas mis armas ( y eso cuesta muchos créditos ), uno de mis amigos, sentado tras de mi y disfrutando de mijoven fallecimiento, me redordó que entonces era jueves. no podía creérmelo, eso significaba que mañana tenia que darle a miprofesor el trabajo del cubo. mi mente pronto se puso manos a la obra ybarajó varias ideas. al final las reduje a dos. podía ponerme a hacer el cubo ahora o…¡perritos calientes!. evidentemente ruben y alex apoyaron la idea de los perritos, lo que solo nos dejaba con doshoras para hacer el cubo. ¡ que casualidad! alex se tenia que ir cuando se termo su perrito y ruben también se intento estaquear. uno mirada fulminante que le proyecte le hizo abandonar su ardua empresay decidió colaborar dócilmente. apartar de entonces mi mente no me deja recordar mas de tres fotograbas seguidos, supongo que es cierto que el cerebro esconde los recuerdos traumáticos. apenas consigorecordar, y no con poco esfuerzo unas imagenes un tanto…digamos extrañas. unas botas militares dando patadas a un cubo de aspecto lamentable, los restos de dicho cubo en llamas defenestrandose. porsi no fuera poco, hay un video. aunque es un tanto confuso, muestra los pasos para como hacer el cubo…no me siento capaz de explicar tales imágenes, dejemos simplemente en que ahora recuerdo miinfancia de otra manera.
tras estos sucesos mi mente recuerda mas lucidamente como acabamos el trabajo del cubo. en fin, simplemente cogimos las laminas de paspartou, de las cuales ya había cortado losbordes varios días atrás con una maquina en la tienda de mi madre. con mucho cuidado las situamos encajando los bordes y los pegamos con una pistola de silicona. tras varios intentos y varios cubos que...