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PARADIGMA KANTIANO*
Carlos l. Massini Correas
«Kant is often eonsidered as the philosopher who summed up the aehievement of the
Enlightenment, defined the frontiers of empirieal knowledge and established(. .. )for ethics
realms of their own beyond the mere appearanees of the world of phenomena»
Norman Hampson, The Enlightenment, p. 196
1.
LAFILOSOFÍA PRÁCTICA KANTIANA
Es un dato aceptado en la filosofía práctica actual, que la concepción kantiana de
la justicia, al menos en sus afinnaciones centrales, no puede ser reducida a un mero
capítulo de la historia de la filosofía, sino que constituye un modelo o matriz de pensamiento que ha perdurado en el tiempo y que tiene concreciones actuantes y vigentes en
el pensamiento contemporáneo. Enun sugerente trabajo publicado con el título de «ls
Kant the Grey Eminence of Contemporary Ethical Theory ?», Henry Veatch sostiene la
tesis de la omnipresencia del paradigma ético kantiano en la filosofía moral anglosajona contemporánea: «la ética contemporánea - escribe Veatch - ha llegado a estar dominada en gran medida por un único paradigma, un paradigma que provee un marco conceptual para loque puede ser denominado, al menos figurativamente, como la «ciencia
nonnal» del esfuerzo ético contemporáneo»!; este paradigma - afinna el filósofo norteamericano - ha tomado sus caracteres centrales de la filosofía práctica kantiana, aún
cuando dejando de lado o modificando varias de sus afinnaciones más características.
Otros autores hablan lisa y llanamente de la «tradición del liberalismokantiano», considerándola la tradición predominante en el pensamiento ético y jurídico actuaF.
En lo que sígue vamos a estudíar las líneas centrales del pensamiento de
Immanuel Kant acerca de la justicia, centrándonos especialmente en aquellas notas de
la doctrina kantiana que han servido de base para la fonnación del mencionado para-
* El presente trabajo es el resultado de un curso dictado comoprofesor visitante, durante los meses
de enero y febrero de 1998, en la Facultad de Derecho de la Universidad de La Coruña. Dcbo dejar constancia aqui de mi proti.ll1do agradecimiento al Prof. Pedro Serna Bermúdez, quien promovió mi est.adía en
Galicia y me recibió alli con la mayor cordialidad imaginable, asi como a los integrantes del Area de
Filosotla del Derecho de aquella Facultad. Asimismo,debo agradceer a Jorge Martíncz Barrera y a Miguel
Verstraete, quiencs leyeron los originales de este trabajo, sugiriendo oportunas correcciones y adiciones.
1 Veatch, ¡l., «[s Kant the Grey Eminence of Contemporary Ethical Theory'?», en Ethics, NI 90-2,
Chicago, Chicago U.P., 1980, p. 218.
2 Vide. Avinieri, S. y De-Sah1it, A., «!ntroduction», en AA.VV., Comunitarianism and Individualism,
Oxford,Oxford U.P., 1996, p. 1.
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Carlos 1. Massini Correas
digma, y limitándonos principalmente a dos obras: Teoría y Praxis y Metafisica de las
costumbres. Esto significa que no habremos de referirnos a los detalles de la concepción kantiana de la filosofía práctica, ni siquiera a todas sus afinllaciones acerca del
derecho; una exposición de ese tipo excedería en mucho nuestro propósito yrequeriría
un extensión mucho mayor que la oportuna en este contexto. Nos limitaremos, por lo
tanto, al estudio y crítica de lo que puede considerarse la versión paradigmática de la
noción kantiana de la justicia, así como al llamado «principio antipaternalista», que es
su consecuencia inmediata.
Pero antes de entrar en materia, vamos a esclarecer una cuestión debatida entre
los autores y que tiene especialrelevancia en el marco de la filosofía de la justicia: la
de si debe considerarse a Kant como un filósofo iusnaturalista o como un sostenedor del
positivismo jurídico. Esta última posición es la sostenida, si bien de modo ambiguo, por
Adela Cortina en su estudio preliminar a la más reciente versión española de la
Metafisica de las Costumbres; allí afirma que «tampoco puede tenerse a nuestro...
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