Deontologia ve etica medica
ESCRITO POR PABLO SIMÓN LORDA
LUNES, 07 DE JUNIO DE 2004
En nuestro país existe un interés creciente por los problemas éticos derivados de la práctica médica. Día a día van saltando a las páginas de la prensa noticias relativas a casos concretos en los que se plantean este tipo de cuestiones. La preocupación del público parece aumentar cadavez ...
En nuestro país existe un interés creciente por los problemas éticos derivados de la práctica médica. Día a día van saltando a las páginas de la prensa noticias relativas a casos concretos en los que se plantean este tipo de cuestiones. La preocupación del público parece aumentar cada vez más, y la sensibilidad de los profesionales sanitarios parece afinarse consecutivamente. Sin embargoel problema central a la hora de afrontar estos conflictos no es tanto de sensibilidades -que también- como de instrumentos.
Los médicos que en su práctica diaria se enfrentan a problemas clínicos, han sido dotados de una serie de conocimientos y habilidades durante su formación en la Facultad y en el Hospital, que les capacitan para resolver este tipo de problemas. Sin embargo, estosmismos médicos no han sido dotados de los conocimientos, habilidades y actitudes necesarios para resolver otro tipo de problemas que siempre van unidos a los clínicos, los problemas éticos. Todo problema clínico, hasta el aparentemente más sencillo, por ejemplo, recetar una aspirina para un dolor de cabeza, encierra un dilema ético, por ejemplo el de informar o no, y en caso afirmativo con quéextensión, de los posibles efectos secundarios de este fármaco. Los médicos no han sido entrenados para detectar y afrontar este tipo de cuestiones, o mejor dicho, los pocos instrumentos que se les han proporcionado se revelan como insuficientes.
El resultado es, primero una sensación de frustración ante este tipo de conflictos, y después un escepticismo brutal ante todo intento de buscarrespuestas racionales para solventarlos. Las cuestiones éticas, en consecuencia, se relegan habitualmente al ámbito de lo estrictamente privado, y por tanto se consideran totalmente relativas, no objetivables de ninguna manera. A la cabecera del enfermo, cada uno hará básicamente lo que su "sentido común" le dicte. Pero sólo con el sentido común -aun siendo imprescindible- no se llega probablemente muylejos: los dilemas éticos son tan complejos o más que los meramente clínicos. Si para aprender a resolver estos se precisan aprendizajes muy concretos, cuanto más para aquellos. La ignorancia es atrevida, pero nadie -supongo-, intentaría diagnosticar y tratar un linfoma con su mero "olfato clínico".
Hasta ahora uno de los pocos instrumentos, mejor dicho el único, que los médicos denuestro país han recibido para encarar los conflictos morales ha sido el de la Deontología Médica. Pero frente a ella se alza en la actualidad otra disciplina que parece ser más eficaz en la resolución de problemas éticos. Esta es la que llamamos Bioética Clínica. Decimos "frente a ella" porque lo cierto es que son marcos conceptuales bien diferentes y que es importante no confundir.
LaDeontología Médica se centra básicamente en los "deberes de los médicos", y toma como principio fundamental la "beneficencia", es decir, la disposición del médico a hacer lo que considera que es bueno para el paciente. Para la Deontología -al menos para la clásica- las opiniones del paciente cuentan poco, de ahí que el tipo de relación médico-enfermo al que tiende sea de corte "paternalista".En ella el enfermo se contempla como un sujeto pasivo, porque se considera que su incapacidad no es sólo física, sino también psíquica y sobre todo moral. Esta mentalidad tiene su origen en Grecia, de ahí que el "Juramento de Hipócrates" pueda ser considerado el padre de casi todos los Códigos de Deontología Médica, y ha conformado hasta hace poco el quehacer de los médicos occidentales, sobre...
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