Derecho
valora la conducta en sí misma, plenariamente, en la significación integral y última que
tiene para la vida del sujeto; en cambio, el Derecho valora la conducta desde un punto
de vista relativo, en cuanto al alcance que tenga para los demás. El campo de imperio de
la Moral es el de la conciencia, es decir, el dela intimidad del sujeto; el área sobre la
cual pretende actuar el Derecho es el de la convivencia social.
Tanto la Moral como el Derecho se encaminan hacia la creación de un orden. Pero el de
la Moral es el que debe producirse dentro de la conciencia; es el orden interior de
nuestra vida auténtica. En cambio, el orden que procura crear el Derecho es el social, el
de las relacionesobjetivas entre las gentes.
"La Moral valora las acciones del individuo en vista a su fin supremo y último"; en
cambio, "el Derecho no se propone llevar a los hombres al cumplimiento de su supremo
destino, no se propone hacerlos radicalmente buenos, sino tan sólo armonizar el tejido
de sus relaciones externas, en vista de la coexistencia y cooperación".
No ha de creerse, sin embargo, que laMoral se ocupa únicamente del individuo, de la
intimidad de su conciencia y, a la inversa, que el Derecho desdeña todo lo que no sea el
campo de las relaciones sociales. La Moral no opone el individuo a la sociedad; por el
contrario, reputa al hombre como un ser eminentemente sociable y lo valora como tal; en buena medida, los actos humanos se juzgan moralmente según su alcance exterior, suvalor social: el camino del infierno está empedrado de buenas intenciones.
Pero es indiscutible que la Moral se dirige más hacia lo íntimo de la conducta humana,
en tanto que el Derecho mira preponderantemente hacia el aspecto externo de esa
conducta. Aludiendo a la interioridad de la Moral, dice RADBRUCH: "El proceso
moral se desarrolla, no entre los hombres, sino en el seno del hombreindividual, en una
silenciosa polémica entre los apetitos y la conciencia, entre la parte grosera y
corrompida y la parte mejor o ideal de nosotros mismos, entre la criatura y el Creador,
en el fondo de nuestro propio pecho. En la Moral se halla el hombre -como Cristo en el
Desierto- en sublime soledad consigo mismo, sometido únicamente a la ley y al tribunal
de la propia conciencia".La Moral supone y requiere libertad en su cumplimiento, pues para que una conducta
pueda ser objeto de un juicio moral, es preciso que el sujeto la realice por sí mismo, que
responda a una posición de su propio querer. En cambio, la norma jurídica es
obligatoria; los individuos no pueden negarse a cumplirla, pues, si lo hicieran, el Estado
los obligaría a cumplirla coactivamente; y si elcumplimiento fuera ya imposible,
aplicará, también coactivamente, una sanción.
Se ha sostenido, sin embargo, que la coactividad no es una nota esencial de lo jurídico,
como lo prueba la circunstancia de que el Derecho se respeta, en la mayoría de los
casos, sin necesidad de ninguna intervención del Estado. En efecto, en la vida jurídica,
la ley se respeta, los contratos se cumplen, sinque, por lo general, sea necesaria ninguna
coacción. Pero lo importante es que la fuerza del Estado está siempre respaldando los
preceptos jurídicos y que, si se los viola, se hace presente para restablecer el orden
jurídico alterado. A nuestro entender, es indiscutible que la coacción es de la esencia de
lo jurídico, a tal punto que no puede concebirse la existencia de un determinadoderecho
positivo, sin la fuerza estatal que lo apoye.
En la Moral, el deber se impone fundamentalmente por causa del sujeto llamado a
cumplirlo, si bien no es posible olvidar que, como ya lo dijimos, el hombre es un ser
eminentemente sociable y que, por consiguiente, al imponérsele un deber moral no sólo
se tiene en cuenta al individuo en sí, sino también a la sociedad en que actúa. La...
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