Desastre educativo
NTRzacatecas.com
Ricardo Monreal Ávila
Jueves 23 de septiembre de 2010
La palabra que mejor define lo que vive el país en términos educativos es“desastre”. Es decir, “desgracia grande, suceso infeliz y lamentable”, de acuerdo con la Real Academia.
A usted le consta. Los niños de tercer año de primaria tienen problemas para comprender lo que leen. A los de sexto se les dificulta multiplicar y dividir. Los de segundo año de secundaria incurren hasta en 10 faltas de ortografía en una plana de escritura. Los de preparatoria reprueban las materias deciencia exacta. Y la mayoría de nuestros hijos quieren estudiar “cualquier carrera, menos una que tenga que ver con las matemáticas”.
Las causas de este desastre nacional están sobrediagnosticadas. Sólo recordemos las más notables.
En la correlación entre “gasto público en educación” y “desempeño educativo” es el más negativo de los países integrantes de la OCDE y uno de los más regresivos entrelos países monitoreados por la UNESCO.
El gasto en educación pública asciende a casi 6 puntos del PIB, superior a Canadá, Australia y Corea, y similar a Reino Unido y Francia; pero el nivel educativo de nuestros niños y jóvenes es equivalente a los del África Subsahariana y a los de Asia meridional.
De cada 10 pesos gastados en educación, 9.3 son para gasto corriente y sólo siete centavos van ainvestigación, ciencia y tecnología. Es decir, estamos gastando mucho en educación, pero no estamos invirtiendo en la civilización.
¿Sabe usted, por ejemplo, que el gobierno destina un promedio de 10 mil 413 pesos al año por cada niño en primaria, 16 mil 100 por cada estudiante de secundaria, 22 mil 480 pesos por cada alumno de bachillerato y 50 mil 300 pesos por cada estudiante en escuelasuperior del sistema público? Es lo que un padre de familia gastaría si su hijo fuese a una escuela particular, con la ventaja de que, por lo menos, usted podría demandar por fraude en la Profeco a la escuela particular que incumpliera, mientras que en contra de la SEP usted no tiene a quien reclamar por la desproporción entre lo gastado y los resultados obtenidos.
Las evaluaciones nacionales yextranjeras coinciden en diagnosticar la pésima calidad de la educación en nuestro país. Por ejemplo, los estudios del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación muestran que una gran proporción de los alumnos de tercero y sexto de primaria y de tercero de secundaria carecen de conocimientos básicos de español y matemáticas.
El Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes...
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