Docente
Aspectos Políticos:
Napoleón
Durante su carrera militar, Napoleón ganó más de cincuenta batallas, récord inigualado en la historia. Sin embargo, perdió la última y esto le costó el trono de Francia, que había recuperado sólo tres meses antes. En la mañana del domingo 18 de junio de 1815, a sólo 16 kilómetros al sur de Bruselas y cerca de un pueblo llamado Waterloo, se enfrentaron losejércitos de Francia contra los de Inglaterra y Prusia. Napoleón no se sentía bien pero estaba convencido de que la victoria estaba en sus manos. Sólo dos días antes había derrotado al ejército prusiano en Ligny y Quatre Bras. Todo indicaba que con esas victorias había logrado un importantísimo objetivo estratégico: dividir las fuerzas enemigas. Para asegurarse de ello, Napoleón destacó una divisiónal mando del mariscal Grouchy, cuya única misión era perseguir a los prusianos y alejarlos del ejército inglés comandado por el duque de Wellington, que se encontraba acantonado en Bruselas. Napoleón logró sorprender a Wellington pero a partir de entonces las cosas no salieron como las había planeado. La noche anterior a la batalla llovió torrencialmente, lo que dificultó el emplazamiento de laartillería y retrasó el ataque francés. En vez de iniciarlo a las 6 de la mañana, Napoleón lo hizo cinco horas más tarde. Si no hubiera llovido esa noche del 17 al 18 de junio de 1815, quizás el destino de Europa y del mundo habría cambiado. A este retraso se sumaron una serie de órdenes mal cumplidas por el mariscal Ney y el general Derlon. Luego, el ataque a un destacamento de tropas inglesasfuertemente atrincheradas en Hougoumont causó enormes bajas a los franceses y contribuyó a absorber recursos necesarios en otros puntos del campo de batalla. El golpe final fue la aparición sorpresiva a media tarde del ejército prusiano sobre el flanco derecho de Napoleón. Fue entonces cuando se definió el resultado de la bata-lla y ocurrió algo impensable: la invencible y tan temida Grande Armée seretiró en gran desorden. “¡Sálvese quien pueda!” fue el grito que se escuchaba en las filas francesas cuando el sol se ponía sobre el horizonte. Los estrategas coinciden en que la campaña de Waterloo fue una de las más brillantes de Napo-león, tanto por la celeridad de sus movimientos como por la manera en que sorprendió y dividió las fuerzas del enemigo. Sin embargo, terminó en una derrotadecisiva. Para Napoleón fue un día incomprensible. Napoleón siguió rumiando sobre lo que sucedió o podría haber sucedido aquel fatídico 18 de junio. La caída de Napoleón tuvo gran impacto en América. Desde 1809 el emperador francés había apoyado de manera inequívoca la independencia de las colonias españolas. Como consecuencia de Waterloo, el movimiento independentista perdió un importante aliado y tuvoque enfrentar por sí solo a una Europa que buscó erradicar cualquier vestigio de la Revolución Francesa en ambos lados del Atlántico. Pero Napoleón no se olvidó de la causa americana. Después de su derrota y posterior abdicación, decidió emigrar con toda su familia a América, que en su opinión “era el único lugar donde nuestros hijos pueden triunfar”. Entre sus seguidores no todos pensaban queera una buena idea. Pierre Fleury de Chaboulon, su fiel secretario, intentó disuadirlo. “Los norteamericanos lo quieren y ad-miran pero Su Majestad tiene gran influencia sobre ellos y quizás los excite a emprender empresas contrarias a los intereses de Inglaterra”, dijo. Las potencias euro-peas probablemente presionarían al gobierno de Estados Unidos para que lo expulsaran de su territorio. “Si losnorteamericanos no me quieren en su territorio, me iré a México. Encontraré allí a los patriotas y me pondré a su cabeza”, contestó Napoleón. “Y si los mexicanos no me quieren, me iré a Caracas. ¡Y si no fuera bien recibido allí, me iré a Buenos Aires!”, exclamó entusiasmado. Su secretario observó cortésmente que los rebeldes ya tenían sus líderes, y estos hacían “las revoluciones para ellos...
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