La contra, movimiento nicaraguense, comentario
1. Aunque al inicio del libro señalas que ‘La contra nace espontáneamente hacia finales de 1979 en respuesta al triunfo revolucionario, sin más ideología que la desesperación y conformada sin ninguna relación entre ellos’ (#13), a lo largo del libro queda en evidencia el patrocinio y dirección del gobierno norteamericano en el proyectocontrarrevolucionario, desde el principio hasta el final;
2. Entender la relación de la contra con el gobierno norteamericano no es algo que debe sorprender a nadie. El régimen de Somoza fue siempre la continuación de la intervención norteamericana con rostro nicaraguense. Somoza no era ‘the last mohican, but the last marine’;
3. Analizar la relación bilateral entre los Estados Unidos y Nicaragua no era, nopodía ser, el objeto de tu crónica, pero ningún trabajo sobre Nicaragua puede prescindir de la influencia abrumadora que ha tenido el primero sobre el segundo. Hay dos trabajos muy valiosos, ambos norteamericanos, Knut Walter ‘El régimen de Anastasio Somoza, 1936-1956’, y Richard Millett ‘Guardianes de la dinastía –la historia de la Guardia Nacional de Nicaragua’, que aportan muchos elementoshistóricos desde una perspectiva académica, alejada de todo apasionamiento partidario;
4. Los problemas de Nicaragua no comenzaron el 19 de Julio de 1979, pero tampoco la revolución sandinista fue la respuesta a todos los problemas acumulados en el país. Las expectativas excedieron a las realidades, y estas últimas no respondieron a las esperanzas de la mayoría de nicaraguenses que se alzaron enarmas con el régimen de los Somoza;
5. Es comprensible que la victoria de la revolución fuese asumida no únicamente como una victoria respecto a Somoza, sino también respecto al gobierno norteamericano, factor clave para el surgimiento, desarrollo y consolidación del Somocismo como sistema político y dictadura militar. Lo que es dudoso que fuera inevitable era hacer de la confrontación con elgobierno de los Estados Unidos la tarea central de la revolución, tal como lo define el llamado ‘documento de las 72 horas de Septiembre de 1979’, al afirmar, ‘we realized more clearly that the true enemy we would have to confront was the imperialist power of the United States and, to a lesser degree, the treachery and demagoguery of the local reactionary bourgeoisie.’ (Análisis de la Coyuntura ytareas de la revolución popular sandinista, Octubre 05, 1979, #1);
6. El destino de Somoza y del Somocismo estaba marcado por su origen, el asesinato a mansalva de Sandino, su compadre. Con ese inicio no podía ser otro su final, no importa el color de la bandera que hubiera entrado victoriosa el 19 de Julio de 1979. Primero le tocó el turno al fundador de la dinastía, cuando el 21 de Septiembrede 1956 correspondió a Rigoberto López Pérez inmolarse para acabar con la dictadura y con ello tratar de abrir los espacios democráticos en el país, y luego el 17 de Septiembre de 1980 le tocó a su hijo Anastasio Somoza Debayle correr la misma suerte y confirmar el refrán de que ‘el que a hierro mata, a hierro muere’;
7. A pesar de los antecendentes intervencionistas de los Estados Unidos en lahistoria nicaraguense, la confrontación no tenía por que ser inevitable. La dirección de la revolución tenía en sus manos la decisión de actuar en forma tal que enviara las señales apropiadas al gobierno de ese país para una convivencia aceptable para las partes. Ese no fue el caso. El mismo documento de las 72 horas, al hablar de la política exterior del nuevo gobierno no podía ser másexplícito, ‘The foreign policy of the Sandinista People’s Revolution is based on the full exercise of national sovereignty and independence and the principle of revolutionary internationalism. The objective of the FSLN’s foreign policy is to achieve the consolidation of the Nicaraguan revolution as this will help to strengthen the Central American, Latin American, and world revolution’ (#14). Esta es...
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